El exdirector general de Radio Televisión Castilla-La Mancha, Nacho Villa, ha afirmado que «todos los gastos que realizó con las tarjetas de representación por un importe total de 133.818 euros en cuatro años estaban justificados» y que «dichas tarjetas estaban sometidas a una auditoría oficial del ente público».
Villa ha comentado las informaciones que indican que gastó un total de 133.818 euros en cuatro años con las dos visas oro que le entregó el ente público para gastos de representación, y que se produjeron durante todos los meses del año, incluidos julio y agosto.
Entre estos gastos, se incluyen pagos en restaurantes, en los que se gastaron unos 20.000 euros; pagos en relojerías, en tiendas de decoración, como Ikea o Leroy Merlín; en los paradores de Turismo, en los que pagó más de 33.000 euros, y en hoteles de cinco estrellas de Madrid y Toledo.
También se reflejan gastos en supermercados y retirada de dinero en efectivo en cajeros automáticos.
Villa ha aseverado que las tarjetas «son públicas, no son opacas» y que «están sometidas a la auditoría oficial del ente público» que era realizada por «la misma empresa que auditaba las cuentas» bajo la dirección de Jordi García Candau, por lo que ha afirmado que «todos los gastos están justificados».
«TODOS SON GASTOS DE REPRESENTACIÓN»
Villa ha resaltado, asimismo, que todos los cargos que realizó a dichas tarjetas son gastos de representación y que «no se han utilizado para nada personal».
Sobre el hecho de que se han realizado pagos en los meses de julio y agosto, el exdirector general del ente público ha indicado que no ha disfrutado «ni un solo día de vacaciones en los cuatro años» que estuvo al frente de la RTVCM y ha añadido que agosto es en Castilla-La Mancha «un mes de muchas ferias, procesiones y toros».
Por lo tanto, ha defendido que él, como director general de «una radio y televisión regionales que eran», procuraba «estar donde estaban» los acontecimientos, como las corridas de toros.
«EL ENTE HA FOMENTADO COMO NADIE LA GASTRONOMÍA REGIONAL»
Asimismo, sobre los gastos en restaurantes, Villa ha afirmado que la televisión autonómica «ha fomentado como nadie la gastronomía regional» e incluso ha afirmado que «a Pepe Rodríguez, antes no lo conocía nadie» y que a raíz que apareció en programas de la CMT «se lo llevaron a Masterchef».
Así, ha explicado que «a veces» él era invitado a su restaurante, que tiene una estrella Michelín, unas invitaciones que eran devueltas con «visitas de cortesía».
Para los gastos realizados en tiendas de decoración, ha indicado que él, como director general de una «tele pequeña» a veces se ha encargado de la decoración de los platós, lo que le llevaba a tener que encargarse personalmente de comprar los muebles o las lámparas para los decorados.
Además, sobre los gastos en corresponsalías, ha apuntado que se pusieron cuatro en marcha -Estados Unidos, Bruselas, Río de Janeiro y Hong Kong- y ha reivindicado que todas ellas tenían el mismo presupuesto, 12.000 euros.
«No es un sueldo mensual, es lo que se pagaba al equipo de cada corresponsalía. Es un alquiler de servicios a una productora, es el abc de la televisión», ha aseverado Villa.
Villa ha afirmado que de estos gastos tenían información «el consejo de administración y las Cortes regionales» y que en sede parlamentaria «se han explicado las cuatro corresponsalías».
Asimismo, ha defendido que el sistema de pago con tarjetas era «mucho más transparente que el anterior sistema de pagos en facturas, que era perverso», pues ha señalado que «las facturas se pagaban en la tele y el rastro de la factura se perdía».
«Una tarjeta des lo más transparente, porque todo lo que se gasta aparece reflejado», ha defendido Villa, quien ha afirmado que asiste «perplejo a la manipulación que se está haciendo con mentiras y más mentiras» y que atribuye a un «divertimento electoral».
Además, ante el anuncio del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de que no descarta acudir a los tribunales tras la información que se derive de la auditoría que investigará el gasto de los 133.818 euros, ha afirmado que está «tranquilo, porque todo está auditado y certificado».