La portavoz del Grupo socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha calificado como de «vergonzosas» las declaraciones que vienen realizando los dirigentes del PP sobre el brote de legionella de la localidad de Manzanares. «En vez de ser responsables se han dedicado a generar alarma social entre la población».
«En vez de hacer una oposición razonable y sensata», señalaba la portavoz del Grupo socialista, los portavoces «populares» se han dedicado «desde el principio del brote a intentar asustar a la población, sembrando zozobra e inquietud y lo que es peor desgastando la imagen de un servicio público de salud que funciona magníficamente tanto en Manzanares como en el resto de nuestra comunidad autónoma».
Para Fernández, resulta muy significativo que hoy, día en el que se conoce que por primera vez desde que se detectó este brote el pasado día 11 de diciembre, no ha habido ningún nuevo caso en las últimas 24 horas, «volvemos a escuchar declaraciones insultantes de dirigentes del PP. Esta vez le ha tocado jugar ese papelón a su portavoz regional, Carmen Riolobos«.
Y es que para la parlamentaria socialista, «Riolobos, Cospedal y el resto de dirigentes del PP «deberían tener un mínimo de responsabilidad y saber que por intentar conseguir un puñado de votos o desgastar al adversario político no vale todo», ha concluido.