Son 17 voluntarios fijos, a los que se suman otros eventuales a lo largo del año y según las tareas. Lo cierto es que desde 2008 las Lagunas de Villafranca son lo que son en la actualidad y se conservan tal y como las vemos, en parte gracias al trabajo de este grupo de personas que de manera altruista y por puro amor al entorno y el medio ambiente desarrollan todo tipo de tareas en los humedales de este municipio manchego toledano.
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Anidamiento de cigüeñas y poda del almendro centenario de la Dehesa son algunas de las últimas tareas llevadas a cabo y que ilustran las fotos de esta noticia. Pero a ellas se suma a lo largo de todo el año su trabajo de limpieza, conservación y concienciación.
Ha sido el propio Ayuntamiento de Villafranca de los Caballeros el que ha destacado y agradecido el trabajo de estos voluntarios. En un comunicado a los medios de comunicación expresan el agradecimiento al colectivo. «Nunca estaré lo suficientemente agradecido al grupo de voluntarios por la labor que desarrollan en pro de nuestro entorno lagunar», afirma en el citado comunicado el concejal de Agricultura y Medio Ambiente, Juan José Gómez. Este ayuntamiento, nada más tomar posesión en junio de 2015, aprobó medidas de promoción de la educación y la cultura, como un programa llamado «toros por libros», consistente en destinar a la compra de libros el dinero municipal que antes iba a organizar espectáculos taurinos.
La exconcejala socialista Sonia Oliver fue la precursora del movimiento en 2008. La portavoz de la plataforma Lagunas Vivas, María del Carmen Comendador, que también es voluntaria, explica que se plantean desde el principio llegar dónde el ayuntamiento no puede.