La organización agraria UPA volverá a formar parte de la Asociación Interprofesional de la Denominación de Origen (DO) de vino Valdepeñas, que abandonó en marzo de 2015 por considerar que el sector industrial no tenía en cuenta a los productores, que solo eran «convidados de piedra».
Así lo ha indicado hoy en rueda de prensa el secretario regional de UPA, Julián Morcillo, que ha explicado que la convocatoria de elecciones en el seno de la Interprofesional y las negociaciones para la modificación del pliego de condiciones en las que está mediando el consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, han sido determinantes en esta decisión.
Morcillo ha explicado que durante los diez meses que han estado ausentes en los órganos de gestión de la Denominación, UPA ha seguido defendiendo desde fuera los derechos de los viticultores y participado en las reuniones del comité de gestión que se constituyó para modificar y actualizar el pliego de condiciones a la situación actual del sector vitivinícola.
Respecto a la convocatoria de elecciones que se aprobará el próximo lunes y que tendrá que ser ratificada por la Asamblea, Morcillo ha subrayado que «es necesario renovar los cargos directivos de la Interprofesional con un espíritu de optimismo y de intentar avanzar».
Asimismo, ha recordado que el proceso electoral estará supervisado por la Consejería de Agricultura, que será la que proponga un «candidato de consenso» para presidir la entidad vitivinícola y que no tiene por qué ser un representante ni de los productores ni de los industriales, «sino una persona parcial y experta en el sector.
El secretario regional de UPA ha aprovechado su comparecencia para agradecer al titular de Agricultura «su implicación directa y su empeño para que la DO vuelva a funcionar con normalidad y sea un orgullo para los agricultores de Valdepeñas y de la comarca».
Y ha recordado que la convocatoria de elecciones está condicionada a la solicitud de ayudas para la promoción y comercialización de los productos agroalimentarios de la Junta.
Por otro lado, Morcillo ha rechazado la propuesta de resolución del Ministerio de Agricultura que contempla un aumento del 0,6 % de nuevas plantaciones en 2016, lo que supone un total de 5.752 nuevas hectáreas de viñedo en toda España.
El dirigente agrario ha considerado que no se dan las condiciones adecuadas para ello, como se recoge en las alegaciones que ha presentado hoy UPA al Ministerio de Agricultura.
A su juicio, la sequía, las 30.800 hectáreas de derechos de plantaciones pendientes en Castilla-La Mancha, la entrada en producción de las viñas de los planes de reestructuración, el bajo consumo del vino y el estancamiento de las exportaciones aconsejan no ampliar la superficie de plantación, sino limitarla.
Morcillo también ha recordado que UPA ha presentado una denuncia formal ante la Agencia de Control Agroalimentario, porque ha detectado que una gran empresa del sector de la comarca está incumpliendo la ley de la cadena agroalimentaria en aspectos como el contrato y los plazos de pago.