Sucedió en la madrugada del 19 al 20 de enero sobre la una, cuando una espectacular bola de fuego cruzó el cielo del sur del país y fue a caer al mar Mediterráneo, tal y como pudo recoger el Complejo Astronómico de La Hita, en la provincia de Toledo, y como les mostramos en las imágenes.
Un evento que fue producido, según el propio Complejo Astronómico, «por el impacto contra la atmósfera terrestre de una roca procedente del cinturón principal de asteroides, una región del sistema solar que se encuentra entre las órbitas de los planetas Marte y Júpiter».
Y es que según el análisis realizado por el profesor José María Madiedo, investigador principal del proyecto, «la roca impactó con la atmósfera a una velocidad de unos 28.000 kilómetros por hora. Un brusco choque que provocó que su temperatura alcanzase rápidamente varios miles de grados centígrados, generándose una bola de fuego cuyo brillo superó al de la Luna llena. Bola que se inició a una altitud de unos 95 kilómetros sobre el mar Mediterráneo».
Penetró en la atmósfera y alcanzó una altitud final de unos 23 kilómetros, muy por debajo de lo que suele ser habitual, ya que la atmósfera actúa como un escudo que destruye completamente a la mayoría de estas rocas por encima de los 60 ó 70 kilómetros de altura. «La baja altitud alcanzada en este caso se ha debido a que una parte del material ha sobrevivido en forma de meteorito, que cayó al mar frente a la costa de Almería».