El líder de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina, ha explicado que «no está en la lógica de romper nada», pero ha avisado al Gobierno regional de que lo que quieren es «política en serio» y «dar un giro de 180 grados, todo lo que suponga un proyecto de región distinto».
«No somos de romper cosas, somos de arreglar cosas», ha afirmado García Molina en rueda de prensa junto al portavoz de Podemos en las Cortes regionales, David Llorente, un día después de la ausencia de ambos diputados del pleno de las Cortes regionales en señal de protesta por no haber sido atendidas sus propuestas en el orden del día.
Los dirigentes de Podemos han negado que lo acontecido esté relacionado con la situación política nacional y han subrayado que ellos están «presionando al PSOE» por otros motivos, como el tener «unos presupuestos dignos«, cambiar «las formas de hacer política», «recuperar y consolidar el empleo público«, «tener una ley de transparencia avanzada» o «una RTVCM en condiciones».
Podemos quería incluir en el Pleno celebrado un debate sobre el distrito único de escolarización en Castilla-La Mancha, pero no fue aceptada su iniciativa porque cuando García Molina llegó a la reunión de la Mesa de las Cortes el pasado lunes ya se había fijado el orden del día.
El líder de Podemos ha insistido en que «lo que ocurrió el lunes fue escandaloso y grave«, pues su retraso fue consecuencia de que se encontraban en la reunión de la Mesa de la Función Pública, algo que ha dicho que conocían los diputados de PSOE y Podemos, y a la que también asistió la portavoz socialista en las Cortes regionales, Blanca Fernández.