El consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, durante la explicación de los Presupuestos regionales ha garantizado que son unas cuentas con las que «no se fríe a impuestos a los ciudadanos», ya que «no se toca el IRPF ni el Impuesto sobre el Patrimonio».
El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, señalaba que «no hay ningún sablazo fiscal en los presupuestos», al tiempo que destacaba que «se suprimen tasas que había subido Cospedal».
Unos presupuestos que contemplan el crecimiento de la economía regional, aunque «hay temores importantes en cuanto a la economía internacional por bajada de las materias primas o la desaceleración de la economía china», lo que a su vez puede repercutir en la economía nacional.
Aún así, destacaba el consejero de Hacienda que los empresarios de Castilla-La Mancha seguirán beneficiándose de la bajada del precio del petróleo, de la paridad dólar-euro y de la política de estímulos del Banco Central Europeo.