Zona afectada por la actuación forestal de la Junta.
El gerente de la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam), Darío Dolz, ha defendido hoy los trabajos de «disminución de vegetación» que se están llevando a cabo en la finca «La Cocinera», en Puertollano (Ciudad Real). Después de que Ecologistas en Acción denunciase «la tala de decenas de miles de encinas» por parte de la Junta, llegando a afirmar que no servirá para el fin con el que se hace: la prevención de incendios, el responsable de Geacam sostiene que este proyecto, incluido dentro de los Planes de Defensa de la provincia, pretende reducir la carga de vegetación del lugar y crear «áreas cortafuegos o de contención» para que, en caso de incendio, la falta de combustible haga más difícil su propagación y para facilitar el acceso y la labor de los equipos de extinción.
Darío Dolz asegura que se trata de una práctica habitual tanto en Castilla-La Mancha como en el resto de España y recuerda que la finca «La Cocinera» ha sufrido numerosos incendios provocados, siendo una zona, además, «antropizada» por la que discurren líneas eléctricas e infraestructuras ferroviarias. Afirma que esta actuación -que recibe el nombre de «resalveo»- «representa una buena planificación». De hecho, explica que este tipo de tratamiento selvícola, muy eficaz en monte bajo, ha ido sustituyendo a la creación de las tradicionales fajas cortafuegos para así evitar la erosión del terreno.
Ayer Ecologistas en Acción indicaba que se estaba cometiendo un «atentado medioambiental» con la tala de «decenas de miles de pequeñas encinas» por parte de la Junta de Comunidades. Añadía que suponía una «gravísima alteración del entorno natural».