Las denuncias por agresión a sanitarios en Castilla-La Mancha han crecido un 43,7 por 100 en los últimos cinco años, registrándose un total de 16 en 2015.
Este es uno de los datos del Observatorio Nacional de Agresiones Médicas elaborado por la Organización Médica Colegial y que ha presentado hoy el Colegio de Médicos de Guadalajara coincidiendo con el 16 de marzo, Día Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, que lleva por lema «Ante las agresiones al personal sanitario, tolerancia cero».
José Ramón Jiménez Redondo, presidente de la comisión deontológica de Guadalajara y miembro también de la comisión regional, ha señalado en rueda de prensa que se registraron 16 denuncias en Castilla-La Mancha en 2015, frente a las nueve de 2010, lo que supone un incremento del 43,7 por 100.
En el caso de Guadalajara, tan solo se registró una denuncia por agresiones, si bien Jiménez Redondo ha insistido en que «el número real de agresiones físicas y verbales es mucho mayor, pero los facultativos no tienen conciencia de denunciar» y ha añadido que las cifras reales pueden multiplicarse «por cientos».
Por esa razón ha hecho un llamamiento a la sociedad para concienciarse en contra de estos actos agresivos contra los profesionales, y a estos les ha animado a denunciar cualquier tipo de violencia.
Según ha indicado Jiménez Redondo, en toda España la cifra de denuncia de agresiones ascendió en 2015 a 361, en su mayoría insultos y amenazas pero sin lesiones.
El 32 por 100 del total son denuncias de lesiones, que se reparten al 50 por 100 en físicas y psicológicas, ha explicado.
El ámbito en el que se producen es mayoritariamente en atención primaria, seguida de hospitalaria y urgencias.
Jiménez Redondo ha destacado el cambio del código penal que ha modificado la calificación de este tipo de agresiones que ahora se consideran un delito de atentado, resistencia y desobediencia a la autoridad y que ya han supuesto 48 condenas en toda España.