La diputada nacional del PSOE por Toledo Guadalupe Martín ha señalado que por muchos actos de partido que celebren los dirigentes del PP, como el que tiene lugar en la localidad toledana de Guadamur, «no van a poder parar» la grave crisis interna que «atenaza cada día más» a su partido.
Martín se ha referido de esta forma al acto que celebra el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, acompañado por la secretaria general y presidenta del PP de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, con Nuevas Generaciones en Guadamur (Toledo).
A su juicio, si hay algo que «está meridianamente claro», es que tanto Rajoy como Cospedal «están cada día más cuestionados porque cargos públicos, militantes y simpatizantes del PP les consideran como los principales causantes de la grave situación que atraviesa su formación política, con cientos de casos de corrupción por todos los puntos de nuestro país».
«No van a poder parar el cada vez mayor ruido interno que hay entre las filas ‘populares’ que demandan cambios radicales y dan por amortizados tanto al presidente como a la secretaria general», ha opinado la diputada toledana.
«TIENE TIEMPO PARA LOS ACTOS PARTIDISTAS, PERO NO PARA COMPARECER ANTE EL CONGRESO»
Del mismo modo, ha criticado que Rajoy «tenga tiempo para este tipo de actos partidistas y no para comparecer ante el Congreso de los Diputados o para atender asuntos de especial importancia para Castilla-La Mancha como el cierre de Elcogas».
Martín ha lamentado que las políticas que ha llevado a cabo el Gobierno del PP, «con la complicidad de Cospedal», han sido «altamente perjudiciales» para Castilla-La Mancha y, en este sentido, ha denunciado que «siga empeñado en llevarse el agua de la región y en traernos la basura nuclear».
Aquí, se ha fijado en que, pese a estar en funciones, el actual Ejecutivo nacional ha aprobado tres trasvases de agua del Tajo al Levante y que Enresa haya adjudicado nuevos trabajos relacionados con el almacén de residuos nucleares en Villar de Cañas.
La parlamentaria socialista ha concluido mostrando su deseo de que «sea la última vez» que Rajoy visita Castilla-La Mancha como presidente del Gobierno.