La Consejería de Agricultura ha acordado incrementar las explotaciones autorizadas para dejar cadáveres de ganado que aumenten el alimento a los buitres y ampliar os muladares para evitar sus ataques al ganado.
Así lo ha avanzado la directora general de Agricultura y Ganadería, Cruz Ponce, durante una reunión de trabajo mantenida hoy con representantes de las organizaciones agrarias APAG, UPA y COAG para abordar la situación del sector en la provincia de Guadalajara.
Respecto a los incidentes ocurridos en los últimos días en la provincia por ataques de buitres a ganado, se ha acordado aumentar el número de explotaciones autorizadas para dejar los cadáveres del ganado en el campo y se incremente el alimento de los buitres, según ha informado hoy la delegación de la Junta en nota de prensa.
En la actualidad, en la provincia de Guadalajara un total de 344 explotaciones cuentan con este permiso y la intención es autorizar un centenar de explotaciones de ovino y caprino más, lo que incrementará notablemente el alimento para estas aves al ponerse a su disposición más kilos de carne.
Asimismo, la Consejería de Agricultura está dispuesta a estudiar las solicitudes que se reciban de la provincia, tanto de Ayuntamientos como de asociaciones de cazadores, para poner en marcha nuevos muladares, y Ponce ha recordado que este año se ha puesto en marcha un muladar nuevo a petición de la Asociación de Cazadores de Alustante.
En el encuentro se han abordado las inquietudes y problemas planteadas por las organizaciones agrarias y a su término la directora general ha manifestado a los asistentes su voluntad de que «esta reunión no sea un hecho aislado» por lo que se ha comprometido a volver a encontrarse, «siempre que sea necesario», en una mesa de trabajo dentro de la voluntad del Gobierno regional de mantener una continua comunicación con el sector.
En cuanto a la quema de rastrojos, la Junta se ha comprometido a establecer un procedimiento para permitir la autorización en los momentos en los que pueda existir un problema de sanidad vegetal.
Con esta regulación se evitarían posibles problemas con el cumplimiento de la condicionalidad que establece la PAC.
Sobre la identificación electrónica del ganado ovino, los representantes de las organizaciones agrarias han solicitado que la edad máxima de identificación pase de seis a nueve meses, algo que la directora general está dispuesta a plantear con la habilitación de un procedimiento para aceptar la petición.
En la reunión, Cruz Ponce también ha informado a las organizaciones agrarias de una nueva orden que se van a publicar a lo largo de este mes sobre ordenación de las explotaciones apícolas.
Por último, respecto a las Asociaciones de Defensa Sanitaria Ganadera, ha anunciado que, también a lo largo de este mes, se va a publicar una convocatoria de ayudas con un incremento para asociaciones de ovino y caprino por brucelosis.