El Ayuntamiento de Toledo y la Asociación de Vecinos «El Tajo» de Santa María de Benquerencia han acordado crear un grupo de trabajo para estudiar soluciones para los residuos de amianto depositados una parcela de este polígono, cerca de la zona residencial. Así lo ha anunciado hoy el Ayuntamiento de Toledo en una nota de prensa, en la que ha indicado que la creación de este grupo de trabajo fue acordada en una reunión que mantuvieron ayer la alcaldesa Milagros Tolón y el portavoz del equipo de gobierno municipal, José Pablo Sabrido, con representantes de la asociación de vecinos «El Tajo».
Tolón se reunió con los vecinos del Polígono para buscar soluciones al amianto.
En la reunión se buscó «aunar esfuerzos y voluntades para ofrecer una solución» a este asunto, ha añadido el Consistorio.
Sabrido ha destacado «el afán constructivo de este encuentro», en el que se puso de manifiesto «la voluntad de la alcaldesa y el compromiso de todos» para buscar conjuntamente soluciones.
Por su parte, el portavoz de la asociación «El Tajo», Víctor Villén, ha calificado de «paso importante» la reunión mantenida y ha valorado que el Ayuntamiento «haya tomado la iniciativa» para el estudio de las diferentes medidas que se puedan tomar.
El portavoz de Ganemos en el Ayuntamiento, Javier Mateo, también ha mostrado su satisfacción y ha comentado que la iniciativa «va en la línea de lo que demandamos desde Ganemos Toledo, lo que exigían los vecinos y lo que en su día reclamó Izquierda Unida».
«Esto demuestra que el equipo de gobierno ha tomado la iniciativa para la búsqueda de medidas concretas», ha destacado Mateo, que ha considerado que «es un paso importante en la dirección de una solución definitiva».
Por su parte, la viceportavoz del grupo popular en el Ayuntamiento, Claudia Alonso, ha recordado en una nota de prensa que Tolón dijo cuando era concejala que el amianto «no era peligroso para la salud y que las escombreras eran naturales» del entorno del barrio de Santa María de Benquerencia.
«Con esa posición política ya se están diciendo muchas cosas», ha aseverado Alonso, que ha cuestionado las medidas que se han propuesto hasta el momento por parte del equipo de gobierno, porque en su opinión «un vallado no impide que los residuos, por filtraciones, acaben afectando a la salud de los ciudadanos que están allí, a escasos 300 metros».
Pero la viceportavoz del equipo de gobierno, Inés Sandoval, ha criticado el «oportunismo» de Alonso, que ahora hace declaraciones «de una grave irresponsabilidad» cuando conoce que tanto el Gobierno local como autonómico «se han puesto manos a la obra para solucionar una situación que el PP no tuvo nunca interés en abordar».
En relación con este asunto el vecino del barrio Héctor Cano del Cerro ha lanzado una campaña de recogida de firmas para pedir que se retiren los residuos de amianto.
La campaña, que comenzó ayer martes, ha recogido ya más de 800 firmas e incluye un texto en el que los vecinos del barrio solicitan «ayuda» ante la presencia de «toneladas de amianto» junto a sus viviendas.
Cano del Cerro ha dicho que el amianto es «muy cancerígeno» y que «no existe cantidad mínima del mismo que no constituya peligro», por lo que ha lamentado que el barrio se encuentra ante «un problema importantísimo de salud pública».
La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, afirmó el pasado viernes que el Ayuntamiento se va a hacer cargo de «vallar y señalizar la zona» donde se encuentra el amianto, una propuesta que reclamaron en la última Comisión de Medio Ambiente el colectivo de ecologistas y de las asociaciones de vecinos.
Desde el año 2005, varias asociaciones ecologistas y partidos políticos llevan solicitando a la Junta y al Ayuntamiento que procedan a la retirada de estos restos de amianto, que fueron depositados por la extinguida fábrica de Ibertubo.
La campaña de recogida de firmas se está realizando a través de la plataforma online change.org.