El provicario general de la Archidiócesis de Toledo, don César García Magán, ha manifestado que «Cáritas es el mejor signo de credibilidad de la Iglesia, donde no sólo se ayuda a los más necesitados sino que también se testimonia esa acción».
El 13 de abril se cumple el primer aniversario del Economato de Cáritas Diocesana de Toledo, situado en el Centro «Beato Cardenal Sancha», en el barrio de Santa María de Benquerencia de Toledo, siendo el primer economato de estas características que hay en la Archidiócesis de Toledo y el primero de carácter gratuito de Castilla-La Mancha.
El Economato es un proyecto compartido entre las tres Parroquias del Polígono de Santa María de Benquerencia de Toledo (San José Obrero, Santa María de Benquerencia y Santísimo Corpus Christi) y Cáritas Diocesana de Toledo. Entre todos forman un equipo, que está dando resultados, contribuyendo a dignificar la ayuda que se da a las familias, en este caso del Barrio de Santa María de Benquerencia, contribuyendo, también, a mejorar las habilidades sociales y alimenticias.
En la rueda de prensa el provicario general de la Archidiócesis de Toledo, César García Magán, ha señalado que la tarea de Cáritas «es el mejor signo de credibilidad de la Iglesia», donde «no sólo se ayuda a los más necesitados sino que también se testimonia esa acción», recordando que «la dignidad de la persona humana debe estar en el centro de la vida económica y social, tal y como se pone de manifiesto en Cáritas».
Asimismo ha destacado «la labor de los voluntarios que son la columna vertebral de Cáritas, ofreciendo un gran testimonio de gratuidad y de servicio a la sociedad», agradeciendo a todos ellos su trabajo y su entrega».
DIGNIFICAR LA AYUDA QUE SE DA A LAS FAMILIAS
El secretario general de Cáritas Diocesana de Toledo, Javier García-Cabañas, ha comentado que este proyecto impulsado por Cáritas Diocesana «está contribuyendo a dignificar la ayuda que se da a las familias, donde no sólo se les ofrece ayuda alimenticia sino que queremos llevar a cabo nuestro gran reto, el acompañamiento. No sólo ayudando sino también estando».
En este sentido García-Cabañas, que ha agradecido el apoyo del arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, y de las tres Parroquias del Polígono en esta iniciativa, ha recordado que «es el primer economato abierto por Cáritas Diocesana en la Archidiócesis y en él se quiere mostrar una atención más cercana y mejorada que se presta a usuarios y familias con necesidades de alimentación, naciendo con vocación de crecimiento en las Cáritas Parroquiales».
MÁS DE 1.000 PERSONAS ATENDIDAS…
En este primer año se han realizado 1.816 atenciones, una media de 170 personas al mes, con la colaboración de empresas que donan alimentos a este Centro de Cáritas, «a las que damos las gracias por su compromiso, necesitando la ayuda de muchas empresas más para poder llegar a más familias».
El coordinador del Economato y del Programa de Reutilización Textil de Cáritas Diocesana, Francisco Villacampa, ha explicado que en este centro sólo hay alimentos y productos de primera necesidad, estando disponibles entre 180 y 200 artículos distribuidos en secciones: verdura (también fresca que procede del Huerto Ecológico de Cáritas), desayunos, artículos para bebés, refrigerados (lácteos, y charcutería), limpieza (de hogar e higiene personal), congelados y no perecederos (aceites, legumbres, pastas, conservas, …) .
Al Economato pueden acudir todos los usuarios de las Cáritas parroquiales adheridas, principalmente del Barrio de Santa María de Benquerencia de Toledo. Estos usuarios son acogidos por cada una de las Cáritas parroquiales y una vez valorada su situación, se les asigna un importe para la compra en el centro, proporcionándoles una cita para acudir al Economato y recoger los alimentos y productos.
Villacampa ha puesto en valor el trabajo que en el Economato, así como en Cáritas, realizan los voluntarios, pues «gracias a ellos el funcionamiento del centro es excelente, con una atención cercana y personalizada». En el Economato los voluntarios proceden de las Cáritas parroquiales adheridas y de algunas Cofradías de la ciudad de Toledo.
REUTILIZACIÓN TEXTIL
En el Centro «Beato Cardenal Sancha» también se lleva a cabo el Programa de Reutilización Textil, que se encarga de la recogida de ropa y calzado en la red de 101 contenedores rojos, instalados en la Diócesis de Toledo. También se recoge ropa de los excedentes de los distintos roperos de las Cáritas parroquiales. La ropa recogida se almacena tanto en Toledo (Centro «Beato Cardenal Sancha») o Talavera de la Reina. Una parte de la ropa recogida es clasificada y está a disposición de las necesidades de los distintos programas diocesanos (Albergue, Vivienda, Proyecto Mater) y de las Cáritas parroquiales que lo soliciten.
La ropa se vende para su destrucción (reciclaje textil) y el valor obtenido se invierte en la compra de alimentos que se envían a las distintas Cáritas parroquiales y la compra de alimentos para el economato en Toledo. «En Cáritas convertimos la ropa en alimentos, consiguiendo en todo momento la trazabilidad ética de la ropa», ha explicado Francisco Villacampa.
MÁS DE 700 TONELADAS DE ROPA
Este Programa de Reutilización Ropa Usada ha permitido recoger en un año y medio 706 toneladas de ropa y calzado. Este programa se encarga de la gestión de las donaciones de ropa nueva y usada a la entidad a través de contenedores metálicos de recogida de ropa y la recogida de excedentes de ropa de los roperos de las Cáritas Parroquiales.
Asimismo Javier García-Cabañas ha anunciado que Cáritas Diocesana se integrará, siendo la 11ª de España, en la red Koopera, un grupo de cooperativas de iniciativa social, empresas de inserción social y otro tipo de entidades no lucrativas, impulsadas por Cáritas. «Queremos convertir el residuo textil en una oportunidad de generar empleo», con la creación de una empresa de inserción laboral, y la constitución de dos tiendas de ropa de segunda mano, en Toledo y Talavera.