Los socialistas de Cogolludo (Guadalajara) han protestado enérgicamente por el hecho de que el alcalde de esta pequeña localidad, Jaime de Frías, del PP, siga manteniendo un sueldo de 56.000 euros anuales y otros 65.000 asignados a los concejales, pese a los recortes previstos en el plan de ajuste presentado para poder acogerse al plan de pago a proveedores que el Gobierno de España ha previsto para que los ayuntamientos liquiden deudas.
En un comunicado público, el PSOE informa de que «el Grupo Socialista, al igual que los concejales independientes, han criticado que a pesar de que el objetivo fundamental del Plan de Ajuste es hacer frente a los pagos pendientes a proveedores, De Frías no ha dudado en incluir dentro del capítulo de gastos unas partidas que se comprometió públicamente a no utilizar».
Por otro lado critican que el alcalde «ha decidido endeudar al municipio durante los próximos 10 años con un préstamo de 279.000 euros para adelantar a los proveedores pagos que, a su vez, el Gobierno de Cospedal adeuda al Ayuntamiento. Sin embargo, según ha anunciado el propio alcalde, cuando consiga cobrar de la Junta de Comunidades las cantidades pendientes, no tiene intención de aplicarlas a la amortización del préstamo, lo que para la oposición municipal supone “un uso fraudulento de la financiación facilitada por el Estado”.
Ambas decisiones fueron adoptadas en el último pleno municipal, del que se ausentaron en bloque los concejales de la oposición «ante los malos modos y falta de talante democrático mostrada por el alcalde, que se resistió a dar cualquier explicación sobre los aspectos más polémicos del Plan de Ajuste. Entre ellos figura el contrasentido de que se reconocen obligaciones de pago por parte del Ayuntamiento inferiores a la cantidad total que suman las facturas presentadas».