La madrugada del Viernes Santo, la más multitudinaria en la ciudad de Cuenca, ha sido «tranquila», sin incidentes destacables y un total de diecinueve intervenciones, la mayoría por intoxicaciones etílicas, aunque también por cortes, heridas y alguna discusión.
Según ha informado el Ayuntamiento de Cuenca, Cruz Roja ha atendido sobre todo intoxicaciones etílicas en las inmediaciones de las zonas de ocio nocturno del centro de la capital, pero también problemas cardíacos, hipotermia y una reacción anafiláctica.
En algunos casos ha sido necesario el traslado al Hospital o al centro de salud, aunque según los servicios de emergencias la noche ha sido «tranquila».
En ello ha tenido mucho que ver que se tuviera que suspender a las 6:00 horas la procesión ‘Camino del Calvario’, conocida como ‘Las Turbas’, por la lluvia, que después se ha convertido en nieve.
La Policía Local, por su parte, ha tenido que intervenir por el aviso recibido de una persona fumando en un bar y retirar vehículos mal aparcados en las inmediaciones del centro de Salud Cuenca III.
En su caso, la Policía Nacional ha tenido que personarse en una vivienda por una pelea, aunque finalmente no ha precisado atención.
El Plan de Seguridad de la Semana Santa de Cuenca 2012 contemplaba un operativo de 350 personas, entre Policía Nacional, Local, Cruz Roja y Protección Civil, entre otros, para velar por la seguridad.