La Fiscalía ha retirado la solicitud de pena de prisión de 12 años por delito de asesinato en grado de tentativa -seis por cada niño- a la mujer que tiró a su hijo de 16 meses y a su hija de 10 años por la ventana de su domicilio de Recas (Toledo) el día 20 de abril de 2015 y que afirma no recordar «nada».
En la vista oral, que ha finalizado hoy en la Audiencia Provincial de Toledo, la Fiscalía ha cambiado su solicitud de condena para M.T.R.S. sobre su acusación de este delito y ha pedido ahora un internamiento de seis años en un centro psiquiátrico para la madre y cinco años de prohibición de acercamiento a menos de 500 metros y de comunicación con los dos menores.
La Fiscalía ha justificado esta nueva solicitud tras la declaración de los psiquiatras que examinaron a la acusada, que han afirmado que debido al consumo de sustancias psicotrópicas -entre 10 y 12 porros al día desde meses antes del suceso-, la madre sufrió un brote psicótico agudo que le provocó «la merma de sus capacidades volitivas y cognitivas».
Sí mantiene la solicitud de dos años por un delito de maltrato habitual a otra hija de 13 años que salió del domicilio antes de que se produjeran los hechos para pedir auxilio al alcalde de la localidad.
Por su parte, la acusación particular, que representa al padre del niño menor, ha rebajado de nueve a seis años la solicitud de prisión para la madre por un delito de asesinato en grado de tentativa al niño de 16 meses y mantiene que se le retire la patria potestad de los menores.
La defensa de la acusada se ha ratificado en su petición de absolución ya que, según ha señalado, «se ha constatado el brote psicótico agudo que le impedían reconocer y recordar los hechos» y debido a ese consumo, la mujer sufrió «una ruptura con la realidad de forma temporal».
Respecto al presunto delito de maltrato, la defensa ha asegurado que la declaración de las personas que han testificado «no reúne requisitos» para que sus testimonios tengan «verosimilitud» con los hechos de los que se le acusan a la mujer, natural de la República Dominicana.
En este sentido, el pediatra de la hija adolescente ha asegurado que en las 23 ocasiones que la examinó no encontró «nunca lesión de maltrato físico» y que, además, le fue diagnosticada «una probable simulación» debido a una crisis convulsiva que la menor afirmó tener en el instituto, por lo que fue derivada a un centro de salud mental infantil.
Sin embargo, la Fiscalía afirma en su escrito que antes del día del suceso la madre golpeaba habitualmente a su hija y que presentaba cicatrices en su cuerpo tras el día del suceso, aunque no se ha confirmado que fueran producidas en ese instante ni por qué fueron provocadas.
Además, uno de los vecinos también afirmó que días antes del suceso vio a la madre agarrando del pelo a la menor en la calle mientras la llevaba al instituto, así como que también escuchaba discusiones en su domicilio.
También varias psicólogas que trataron a la menor han confirmado las declaraciones de la hija que, según ha indicado la Fiscalía, testificó ayer «de forma creíble» en la vista oral, donde aseveró haber sufrido maltrato por parte de su madre de forma continuada, así como también afirmó que no la había visto maltratar a los otros dos hermanos.