El CD Toledo esta obligado a ganar el domingo 8 al Rayo Vallecano B (12:00 horas) para mantener intacto su sueño de lograr la permanencia porque ahora mismo, a falta de seis jornadas para la conclusión, está en puesto de descenso directo. Una situación impensable hace siete jornadas, las que lleva sin ganar y en las que tan solo ha sumados dos empates, y que ha devuelto los mayores temores, tras la ocurrido hace dos campañas cuando necesitaba un punto, que no logró en las seis jornadas finales de campeonato, y terminó descendiendo a Segunda B.
Con esa idea fija en más de una mente, el nuevo técnico del cuadro verde, el madrileño Antonio Acosta, que debuta ante su nueva parroquia tras comenzar su periplo con derrota en Tenerife (1-0), en el tiempo de descuento, aspira a dar un tono más ofensivo después de que en el Heliodoro Rodríguez no chutara ni una vez a puerta. Ante los rayistas, Acosta ha hablado de jugar con más intención atacante que permita optar a un triunfo que se antoja ineludible para no empeorar una situación ya de por si peligrosa.
Ante el Rayo B son bajas seguras el central Dani Gómez, por sanción, y el centrocampista defensivo Diego Ramírez, por la tenditinis que no termina de curar, mientras que se mantendrán las dudas, hasta última hora, de los zagueros Javi Sánchez y Alberto, porque es segura la vuelta de Gerardo, cumplido su partido de castigo en Tenerife.
Todo indica que sí estarán a disposición del técnico tanto el centrocampista Encinas como los atacantes Carlos y David Sanz, todos ellos que acabaron la sesión del miércoles con golpes que, salvo empeoramiento, no parecen revestir mayor gravedad, y que parecen tener puesto fijo al ser los hombres más ofensivos, precisamente la gran rémora de los verdes.
Y es que no se puede olvidar que el cuadro toledano es el menos goleador del grupo (26 goles, por 28 el Sanse madrileño), que es el principal lastre de que esté cuarto por la cola, en puesto de descenso, aunque tenga los mismos puntos (33) que el Conquense y el Sanse, antepenúltimo, a uno de Alcalá y Leganés, que son, ahora mismo, los grandes «enemigos» del Toledo.
Por tanto, para intentar amarrar los tres puntos, algo que no se conoce en el Salto del Caballo desde el pasado 19 de febrero, cuando se derrotó al Sporting B (3-1), un hipotético once inicial podría ser el formado por Saavedra, Amores, Andriu, Alberto, Javi Fernández, Gerardo, Abel Buades, Encinas, Dani Alonso, Carlos y David Sanz.