La serie de televisión «El Ministerio del Tiempo» acudió a ellos para realizar un episodio centrado en Miguel de Cervantes y «nos pidieron soporte visual de nuestro proyecto de Iconografía Popular», comenta Esther Almarcha, directora del Centro de Estudios de Castilla-La Mancha, que ha servido de base para más series y documentales de historia.
Se trata de un centro que lleva 20 años trabajando y acudir a él es poder bucear por la historia de la región. Tiene casi dos millones de elementos digitalizados, entre revistas, publicaciones, postales, fotos… que están al servicio del público en general gracias a internet. De este modo, con un solo clic se puede acceder a información tanto regional como de aquellos pueblos que ya se han sumado a este proyecto.
Libros, prensa, revistas, fotografías, sellos… «La joya de la corona es un calendario de 1769 francés donde la parte superio es un maravilloso grabado del Quijote«, explica Esther, mientras destaca que «a través de dos millones de páginas digitalizadas nos podemos hacer una idea de Castilla-La Mancha».
El punto de partida básico, desde el punto de vista de Las Humanidades (facultad de la que depende el Centro), es recoger información sobre el tema y desarrollarlo desde una línea de investigación. «El concepto de investigación tiene que dar un salto cualitativo y cuantitativo en otros ámbitos que no sean solamente bibliográficos», si bien su idea parte de recoger aquella información que no estaba en ninguna institución con el objetivo de no solapar el contenido y seguir sumando.
Entre el trabajo desarrollado, destaca la recopilación de prensa histórica lo que ha permitido, por ejemplo, descubrir que la localidad ciudadrealeña de Valdepeñas ha llegado a tener hasta 36 cabeceras de prensa que, gracias a este centro, se conservan. Además, la digitalización de las mismas permite que estén al servicio de todos aquellos que quieran acceder a ella.
En esta Torre de Babel que conforma toda la documentación del Centro destacan algunas como la revista Vida Manchega, la primera revista ilustrada que permite acercarse a temas como «una bomba en Puertollano», «un sangriento suceso en Almagro» o el invento que utilizaron en Ciudad Real para ver el eclipse de sol.
A ello se suma otra línea de trabajo que se centra en el tema de la fotografía histórica y social, así como documental. A finales de 2012 se dieron de alta en Flickr y comenzaron a publicar en 2013 fotografías de Castilla-La Mancha. Con ello han superado los dos millones y medio de visitas y cuentan con unas 5.000 imágenes subidas a un ritmo de entre cinco y 15 fotos subidas a la semana.
Contenido donde no falta el dedicado al Quijote y que les permite conocer todos los días algo nuevo del famoso hidalgo. Durante este trabajo se dieron cuenta de que «la mayor parte de la gente identifica al Quijote, pero no ha leído al Quijote». En su opinión, esto se produce porque «recibimos miles de impactos del Quijote en nuestra vida desde lo más obvio, como es la silueta del Quijote, hasta cosas elaboradas».
Precisamente el Centro se encarga de recopilar ese «repertorio visual» que es «magnífico» y que se compone de postales, cromos, sellos, banderines, marcapáginas… de cualquier parte del mundo. De este modo han descubierto que «es mejor tratado fuera de España que en España. Las ilustraciones en el extranjero son maravillosas». En este sentido, destacan unas entradas a un parque temático en Japón o el primer cómic que se hizo en castellano, que es mexicano.
Son documentos únicos que permiten mantener viva la historia de Castilla-La Mancha y que se puede consultar a través de la red. Casi dos millones de páginas digitalizadas que van creciendo poco a poco y, a través de ellas, se puede viajar por el tiempo.