Los diputados del grupo popular han abandonado el Pleno que ha celebrado hoy la Diputación Provincial de Ciudad Real, para mostrar su rechazo a unas palabras que ha dirigido el vicepresidente cuarto, David Triguero, al diputado del PP Diego Ortega, al que ha dicho «mentir es pecado».
El portavoz del grupo popular, Antonio Lucas-Torres, ha justificado que hayan abandonado el Pleno porque han entendido que Triguero «ha llamado mentiroso» a Ortega «y se ha mofado de sus creencias religiosas».
Acompañado del resto de diputados «populares», Lucas-Torres ha advertido que su grupo no va a permitir «que el vicepresidente de Cultura vuelva a insultar jamás a un diputado del PP y a la inteligencia de la provincia mofándose de la libertad religiosa».
Lucas-Torres ha añadido: «Este señor, si quiere estar en una institución respetuosa tiene que serlo» y ha considerado que no lo está siendo «al actuar como la criada y mandadera de Page y Podemos».
Por su parte, el grupo socialista ha lamentado que el grupo popular se haya olvidado de los intereses de los ciudadanos de la provincia «y haya acatado las directrices de enfrentamiento y crispación de su presidenta regional», María Dolores de Cospedal.
Estas directrices «no benefician para nada a los intereses y preocupaciones de los ciudadanos», han añadido.
Los socialistas han cuestionado la actitud de los diputados del PP, «por el mero hecho» de que Triguero ha empleado en su intervención «la frase coloquial mentir es pecado, que es entendida como tal por toda la sociedad».
El grupo socialista ha considerado «que se ha creado una escena desagradable e innecesaria, que para nada es ejemplo de la política dialogante y colaborativa que debe primar en la institución por el bien de la provincia y sus ciudadanos».