El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha afirmado hoy que «no estaría mal desacralizar la política» y ha agregado que los políticos no deberían «arrogarse el papel mesiánico de salvadores de la vida de los ciudadanos» ya que «la cuestión es servir, no servirse».
En su escrito semanal, sobre la ordenación de sacerdotes en tiempos actuales, monseñor Rodríguez ha opinado que «no es camino anular al adversario» y que «no es bueno volver a pasados odios y enfrentamientos, a rupturas que no llevan a buen término».
Ha aludido al papa Francisco cuando dice que «dialogar no es negociar. Negociar es tratar de llevarse la propia tajada de la tarta común. Dialogar es buscar el bien común para todos».
Y ha agregado que «si pensamos en nuestros políticos, no estaría mal desacralizar la política. Quiero decir que ellos no deben arrogarse el papel mesiánico de salvadores de la vida de los ciudadanos. La cuestión es servir, no servirse».