El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha afirmado hoy que los planes de gestión de las zonas de especial protección de aves (ZEPA) serán compatibles con la actividad agrícola y ha abogado por hacer compatible agricultura y medio ambiente.
A preguntas de los periodistas, sobre las críticas de algunas organizaciones agrarias a los planes de gestión de las zonas de especial protección de aves (ZEPA), Martínez Arroyo, ha comentado: «Hay que hacer compatible, en los espacios protegidos, la actividad económica, que fundamentalmente es agraria, con la preservación del espacio natural».
Y ha sentenciado: «Estamos obligados a hacer planes de gestión, se tenían que haber hecho en la última legislatura y no se hicieron, tenemos una sentencia judicial que nos obliga a hacerlos y evidentemente los vamos a hacer».
No obstante, ha avanzado: «Vamos a hacer planes de gestión que permitan que siga habiendo agricultura, que siga habiendo actividad económica y que además se tenga en cuenta los excelentes espacios naturales de nuestra región».
Asimismo, ha señalado que los planes de gestión se están elaborando en colaboración con las organizaciones agrarias y las organizaciones ecologistas», porque según ha considerado: «Desde luego, no hay futuro para los espacios naturales en Castilla-La Mancha sin actividad económica y eso se lo he trasladado personalmente a las organizaciones agrarias»
En este sentido, ha dicho: «No podemos intentar preservar nuestro medio ambiente, mantener esas zonas y su biodiversidad, si no hay habitantes, si no hay agricultores, si no hay ganaderos, por lo tanto siempre y ante todo la principal especie en peligro de extinción y en esto coincido con ellos y lo digo mucho, los agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha».
«Pero ellos tienen que saber que para su futuro, también es necesario que seamos capaces de convivir desde el punto de vista de la agricultura y del medio ambiente y estoy convencido de que entre todos lo vamos a hacer», ha añadido.
LA JUNTA ESPERA QUE LA CONVOCATORIA FOCAL GENERE 500 MILLONES DE INVERSIÓN
El Gobierno de Castilla-La Mancha calcula que la nueva convocatoria de ayudas Focal a la industria agroalimentaria que sacará en otoño, por importe de 70 millones de euros, generará una inversión en la región de 500 millones de euros y la creación de entre 7.000 y 8.000 empleos.
Así lo ha indicado hoy el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, tras mantener una reunión con responsables de CCOO en el sector agroalimentario.
Martínez Arroyo ha comentado que la convocatoria de las ayudas al Fomento de la Calidad Agroalimentaria (Focal) que se sacó el año pasado ha conseguido movilizar 325 millones de euros a partir de una inversión pública de 50 millones, por lo que la que se va a sacar en otoño ha generado unas grandes expectativas tanto en inversión empresarial como en generación de empleo.
La convocatoria será de 70 millones de euros públicos y teniendo en cuenta que va a incluir al vino y el interés enorme que transmite el sector de la industria agroalimentaria «puede suponer una inyección económica en la industria agroalimentaria de en torno a 500 millones de euros en Castilla-La Mancha», ha calculado.
También ha estimado que puede generar entre 7.000 y 8.000 empleos, teniendo en cuenta que los 325 millones de inversión inducidos por la convocatoria reciente va a suponer la creación de más de 5.000 empleos en la industria agroalimentaria regional.
Estos empleos y estas inversiones «son clave para el desarrollo de nuestro medio rural«, ha asegurado Martínez Arroyo, quien ha dicho: «Sin empresas agroalimentarias en el medio rural no tendríamos pueblos con vida en Castilla-La Mancha y por lo tanto esto tiene que ser y es una prioridad absoluta del Gobierno regional».
En este sentido, y a preguntas de los periodistas, ha abogado por que el Gobierno de España negocie unas buenas condiciones con la Comisión Europea, para que la multa que se puede imponer a España por el incumplimiento del déficit no afecte al desarrollo del país.
Martínez Arroyo ha recordado que la Comisión Europea ha advertido que puede haber una congelación de los fondos comunitarios de desarrollo rural, de desarrollo regional (FEDER) y los dedicados al empleo en el Fondo Social Europeo (FSE), por lo que «no hay otra solución que el Gobierno negocie unas buenas condiciones para que España no se vea afectada por este tipo de sanciones«.
Y aunque esta negociación «evidentemente la tiene que hacer el Gobierno central, desde Castilla-La Mancha tenemos que estar alerta, porque no podemos permitirnos una congelación de fondos europeos, que de alguna manera mermaría o limitaría nuestro desarrollo inminente», ha advertido.
El consejero ha insistido en que la última línea de ayudas Focal con 50 millones de euros públicos supone una movilización de 325 millones de euros privados y que «solo puede existir porque hay un Programa de Desarrollo Rural (PDR) y evidentemente si este programa se congela no podríamos sacar una convocatoria en otoño».
En cualquier caso, se ha mostrado convencido «de que esto no va a suceder, porque evidentemente el Gobierno de España tiene que buscar una solución y hacerlo cuánto antes».