El Partido Animalista (Pacma) ha calificado de «sangriento espectáculo» la carrera de gansos que se celebró el lunes 25 en El Carpio de Tajo (Toledo), una tradición ancestral en la localidad y en la que participan cientos de personas.
El principal objetivo «es que los participantes, montados a caballo, consigan arrancar la cabeza a gansos colgados boca abajo en el centro del pueblo. Espectáculo que es observado por una multitud de personas que se concentran alrededor, entre las cuales hay menores de edad. Cuando los participantes logran desmembrar al animal se reúnen con sus familiares para celebrarlo, portando la cabeza del animal en la mano como premio».
Pacma insiste en que «los animales, que anteriormente se colgaban vivos, son sacrificados previamente con el único fin de servir de trofeo a los participantes, dando un sangriento espectáculo en el que se arrebata la vida a seres capaces de sentir y sufrir».
Una fiesta «que no es más que otro evidente signo de la falta de consideración que sufren los animales en nuestro país tanto a nivel ético como institucional, ya que no hay ninguna ley que ampare a estos animales y que pueda evitar que sigan siendo utilizados como meros objetos en rituales medievales de este tipo. Aun peor, como en el caso de El Carpio, el desprecio hacia la vida de los animales y la crueldad se apoyan y patrocinan desde los propios ayuntamientos».