El nivel de pozo de captación municipal de agua potable del municipio de Daimiel, situado en pleno Acuífero 23, que abastece de agua el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, ha descendido en el último mes hasta niveles de noviembre de 2012.
Según la información facilitada hoy por el Ayuntamiento de Daimiel, el nivel del pozo de captación municipal ha acabado julio por debajo de 13,30 metros del nivel freático, lo que supone acercarse al nivel que llegó a tener en noviembre de 2012 en los que registraba un descenso de -13,50 metros.
En el último año, el descenso es de 1,8 metros, que es un dato significativo, aunque, para el concejal de Agricultura, Ricardo Sáez, no es «muy alarmante» teniendo en cuenta que la recarga de los dos últimos años ha sido menor .
Sáez ha comentado que en abril llovió lo suficiente para salvar los cultivos, «pero no en la medida del ciclo anterior» lo que ha supuesto incrementar los riegos.
El concejal ha apuntado que en otros sondeos que mide regularmente la Comunidad de Regantes de Daimiel la bajada es de «alrededor de un metro»
Por delante, ha apuntado, «quedan 20 días críticos» de riegos y, a partir de ahí, el nivel debería empezar a subir como todos los años.
No obstante, el concejal de Agricultura ha recalcado que «la conciencia entre los agricultores es mayor, y los controles también».
Gracias a ello, ha apuntado «se saca el agua que se puede sacar» y se evita que «los niveles tengan oscilaciones tan exageradas» como épocas pasadas donde la cota bajó hasta los menos 43 metros en el pozo de captación municipal.
La inundación del parque nacional de Las Tablas de Daimiel se produce como consecuencia de los aportes de agua de los ríos Guadiana y Gigüela y de los aportes que en gran medida recibe procedentes de la descarga del acuífero en la Llanura Manchega, también conocido como Acuífero 23.