«El Gobierno de Castilla-La Mancha celebrará el próximo sábado en Talavera de la Reina un acto institucional con motivo del Día de la región. Los sindicatos CCOO, UGT, STAs-Intersindical y USO llamamos al resto de la ciudadanía, a todos los que sufren las políticas de Cospedal, a manifestarse ese mismo día en Toledo. Porque tras tres años de Gobierno del PP en nuestra comunidad autónoma, la inmensa mayoría de los castellano-manchegos no tenemos nada que celebrar y sí mucha indignación que manifestar y mucho por lo que luchar
Cuanto más nos bombardean con su discurso de la recuperación, -y no paran: la reciente campaña electoral nos ha hecho padecerlo hasta la saciedad-, más crece el número de indignados… y con toda la razón.
Dicen que el país está creciendo, que se está creando empleo, que los servicios sociales básicos, la educación, la sanidad… están garantizados, que los derechos de los ciudadanos, especialmente de las mujeres se respetan y que todo empieza a estar bien.
Dicen que se están empezando a ver los resultados de su política. Eso es verdad, claro que sí: entre los resultados que se ven, nos encontramos con unos servicios sociales, una educación y una sanidad tan, tan, tan básicos… que se están quedando esqueléticos y raquíticos.
¿De qué recuperación hablan, de la recuperación de quién?
Sin embargo, nadie ve que se recuperen las más de 300.000 personas que no tienen trabajo en CLM, un 30,30% de la población activa. 90.000 más que cuando Cospedal llegó a la Presidencia de CLM.
Ni los más de 134.000 parados de la región que no perciben ningún ingreso, cuyo número no deja de crecer.
Ni las familias -el 16,80% de todas las familias de CLM; y cada vez más- en las que no entra ni un salario.
Ni los jóvenes que no encuentran un empleo, seis de cada diez.
Ni las decenas de miles de pensionistas que malviven con una pensión de miseria.
Ni los trabajadores que, pese a tener un empleo, no pueden hacer frente a sus necesidades básicas.
Ni los comerciantes y autónomos, que se ven abocados a cerrar por la paralización del consumo.
Ni los más de 14.000 desahuciados de sus viviendas.
Ni las familias con personas dependientes, privadas de las ayudas públicas. Ni las que ya no pueden acudir a los servicios sociales que antes les prestaban los ayuntamientos.
Ni los enfermos a los que no atienden en los hospitales o los hacinan en los pasillos. Ni los que no pueden pagar las medicinas que antes recibían gratis o mucho más baratas.
Ni los jóvenes que no pueden empezar o seguir sus estudios por la subida de tasas y la reducción de las becas. Ni las familias a las que condenan a que sus hijos sean escolarizados en grupos masificados.
Ni los inmigrantes, que son más del 10% de la población de CLM, de los que sólo se habla como problema y cuyas necesidades específicas de empleo, enseñanza, asistencia sanitaria, formación… no merecen ninguna atención del Gobierno.
Ni los trabajadores públicos despedidos a los que, pese al deterioro de los servicios públicos, se niega toda posibilidad de recuperar sus empleos, entre ellos los que siguen en paro pese a que las sentencias obligan al gobierno a readmitirlos.
Ni los conductores que, pese a haber aprobado una oposición, se ven expulsados de sus puestos de trabajo para ser sustituidos por asesores nombrados a dedo.
Ni los trabajadores que viven pendientes de una condena de años de cárcel por ejercer su derecho de huelga. Ni las mujeres a las que se niega el derecho a disponer libremente sobre su maternidad. Ni los colectivos a los que se niega la utilización de los espacios que son de todos.
Ni todas las personas de buena voluntad que consideran injusto e indigno todo lo que está ocurriendo.
No vemos la recuperación. Sí vemos los efectos de sus políticas
La inmensa mayoría no vemos la recuperación. Lo que vemos es empeño en negar lo que han hecho, ganas de tomarnos por tontos y la firme decisión de perpetuar esta situación.
¿Cómo se puede decir que no se ha cerrado ni un hospital ni una escuela en una provincia como Cuenca, donde se han cerrado 32 escuelas?
¿Cómo se puede presumir de que se han creado unos cuantos empleos tras haber destruido miles? ¿Acaso creen que no nos acordamos?
Lo que sí que vemos son los efectos de sus políticas, sí: y son un descenso drástico del nivel de vida de la inmensa mayoría, un incremento alarmante de la pobreza y una política fiscal que baja los impuestos a los más ricos y hace regalos fiscales a las rentas más altas y a los grandes patrimonios.
A todos los que, como nosotros, sufren el desastre y no ven la recuperación les llamamos a decir con nosotros el sábado que ¡no hay nada que celebrar!
A los parados, a los que no tienen ingresos, a los que no pueden vivir dignamente con los ingresos que tienen, a los desahuciados, a los que no reciben los servicios y ayudas que necesitan y merecen, a los que estos gobernantes les niegan los derechos que les reconocen los jueces, a quienes son sancionados o viven amenazados con la cárcel por ejercer sus derechos, a las mujeres a quienes niegan su derecho a disponer de su propio cuerpo, a quienes niegan el derecho a reunirse, a quienes no quieren que les privaticen lo público… a la inmensa mayoría que no tiene nada que celebrar… los esperamos el sábado a las 12 en el Paseo de la Reconquista de Toledo».
Alfonso Gil, coordinador del Área Pública de CC.OO. CLM.