El hombre se ha declarado inocente y ha negado los cargos que le acusan de drogar y violar a dos menores tuteladas, llegando a extorsionar a una de ellas con cocaína a cambio de sexo en varias ocasiones. Ha sido durante el juicio que ha tenido lugar este miércoles, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete, donde J.M.Z.C. ha asegurado que nunca mantuvo relaciones sexuales ni facilitó droga a las denunciantes.
Sí que ha reconocido haber sufrido drogadicción y consumir de manera habitual con la madre de una de las menores, R.M.G.G., también acusada en esta causa, pero, asegura, «siempre que B. no estuviera delante».
Las menores aseguran haber sido violadas
Declaraciones que se contradicen con las versiones de las víctimas, que afirman haber sido violadas por el acusado.
«Me acompañó al baño y me subió al lavabo, no paraba de tocarme, yo gritaba para que me dejara y le daba patadas, pero no podía apartarle, no tenía fuerzas, al final consiguió penetrarme«, lamenta A., compañera del centro de menores de B.
Fue el 5 de agosto de 2020, cuando las dos menores fueron a una nave en el polígono de Campollano, donde el procesado estaba drogándose con un amigo. Durante el transcurso de la noche, A. se empezó a encontrar mal, ya que era la primera vez que consumía ‘base’, y pidió a J.M.Z.C. que la acompañara al baño, lugar donde, según la denunciante, se produjo la agresión.
«Me obligó a practicarle una felación, para, de nuevo, volver a violarme. Llegó un momento en que ya no hice nada, me rendí. Cuando terminó, intenté lavarme y le pedí a B. que nos fuéramos». Horas después, A. le contó lo ocurrido a sus padres, que la llevaron al Hospital General de la capital, donde le practicaron las pruebas pertinentes, emitiendo un parte de lesiones con los moratones que presentaba en cadera y piernas.
Además, a consecuencia de estos hechos, la menor se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico, ya que, según ha explicado, sufre bulimia e intentos autolíticos. «Me dan pesadillas por esto, tengo que tomar Orfidal. También tengo cortes en los brazos, he intentado suicidarme muchas veces a raíz de lo ocurrido porque no me reconozco».
«Me enganchó a la cocaína para después pedirme sexo a cambio»
También B. afirma haber sido violada por el acusado, que le daba cocaína a cambio de sexo.
«A mi me daba asco y miedo, pero estaba enganchada, necesitaba la cocaína», cuenta.
Una adicción que comenzó entre diciembre de 2018 y enero de 2019, cuando el procesado se fue a vivir con la menor, que tenía 14 años de edad, y su madre. Fue ahí cuando, una noche, J.M.Z.C. emborrachó a la acusada y, cuando esta se fue a dormir, violó a B.
«Yo me encontré mal por el alcohol y los porros, nos empezamos a besar, pero le dije que se quitara, que me estaba empezando a dar miedo, después de eso se vino a mi habitación, me empujó y me violó, al terminar me dio cocaína, así fue como empecé a engancharme«.
A partir de ahí, el acusado y la menor empezaron a quedar para consumir. «Al principio me daba cocaína de manera gratuita, luego me dijo que si quería más tenía que follar con él«.
La madre no ha querido declarar
Sobre las acusaciones contra su madre por prostituirla a cambio de dinero o droga, B. no ha querido hacer ninguna declaración. Tampoco la propia acusada, para quien la Fiscalía solicita 12 años de prisión por un delito continuado de corrupción de menores, ha querido testificar.
Igualmente, el Ministerio Fiscal solicita hasta 55 años de prisión para el acusado por dos delitos de agresión sexual, un delito continuado de abuso sexual, otro contra la salud pública y un último de extorsión de menores.