El brote de coronavirus que se ha detectado en un campamento irregular de Albacete ha causado, hasta el momento 23 casos positivos de coronavirus y 385 negativos, y hasta el momento se han realizado 408 pruebas.
Fuentes del Gobierno regional han informado este lunes a Efe de los datos actualizados de este brote, que se detectó el viernes 17 de julio en este campamento irregular, en el que residen unos 500 temporeros, algunos de los cuales este domingo han protagonizado protestas porque no se les dejaba salir del asentamiento, ubicado en las antiguas naves de «Cereales Saltó».
Albergar a los casos negativos en la Institución Ferial de Albacete
Estas mismas fuentes han indicado que se está acondicionando la Institución Ferial de Albacete (IFAB) para albergar a quienes han dado negativo en COVID-19 y está previsto que este martes da puedan estar todos ubicados allí.
Por otro lado, las 23 personas que han dado positivo en COVID-19 están aislados en el IES Tomás Navarro de Albacete.
Asimismo, han precisado que el Gobierno regional corre desde el viernes con los gastos de la comida y manutención de todos los confinados en el asentamiento irregular y que se tramitará la Incapacidad Temporal de quienes hayan dado negativo en la prueba PCR que tuvieran contrato de trabajo y se impida ir a trabajar por el confinamiento.
Instalación cedida por la Diputación de Albacete
Por otro lado, en un comunicado de prensa, la Diputación de Albacete ha confirmado que ha cedido el uso de las instalaciones del recinto ferial de la IFAB al Ayuntamiento de Albacete, una petición que hizo llegar el alcalde de la ciudad, Vicente Casañ, a la institución provincial este domingo a última hora.
El presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero, ha asegurado que la decisión de ceder este espacio al Ayuntamiento ha sido respaldada por unanimidad por todos los grupos políticos de la Corporación Provincial a primera hora de este lunes, tras ser consultada en Junta de Portavoces.
Esta decisión se comunicará por escrito al Consistorio para que los trámites administrativos sigan su curso.
Lo primero, proteger la salud de las personas
Cabañero ha incidido en que «la prioridad, en todo momento desde que comenzó esta crisis sanitaria del COVID-19, ha sido proteger la salud de las personas» y ha destacado que, con esta cesión, además de ayudar al Ayuntamiento y a las autoridades sanitarias a acatar el mandato judicial que dicta el confinamiento de estos temporeros, la Diputación suma esfuerzos para proteger la salud pública de la ciudadanía al tiempo que aporta lo que está en su mano para que los temporeros puedan pasar este periodo en condiciones dignas.