La aventura está siendo muy complicada. Se habían conseguido los dos primeros objetivos de este trekking inclusivo invernal para deportistas con discapacidad, en el que participa el bombero albaceteño Óscar Cardo junto a miembros de la Asociación Amiab habían logrado llegar al Campo Base y coronar la cumbre invernal Ama Dablam.
«Me quedé tirado en la nieve retorcido de dolor»
Pero como el propio Cardo ha narrado, allí le afectó el mal de altura y hubo de ser rescatado en helicóptero y trasladado a un hospital en Katmandú, la capital de Nepal, desde donde será repatriado a España.
Así lo recoge la nota de prensa la organización del trekking, en la que figura el testimonio del bombero: “Llegó un momento en el que empecé a encontrarme mal, tenía molestias por el pecho, por el vientre, me dolían los riñones, notaba cansancio y como si algo me estrujase por dentro. Hubo un momento en el que me quedé tirado en la nieve retorcido de dolor y sin apenas fuerzas para continuar».
[ze_gallery_info id=»365706″ ]La altura a la que se encontraban a este momento era una complicación más, según el relato de Óscar Cardo: «Mis compañeros avisaron al helicóptero pero el aparato no podía llegar a esa altura, era muy tarde y el viento no aconsejaba vuelos tan alto, y además se echó la noche encima y pasé un velada horrible, retorcido en la tienda y sin posibilidad de moverme para perder altura”.
Para él ha terminado esta impresionante aventura, que Álex Txikon continuará la aventura con los tres sherpas como único apoyo.
«Iba como un cohete» y apareció el mal de altura
La organización expone en su comunicado que Óscar relataba encontrarse “en pleno estado de forma, subía y bajaba sin apenas cansancio excesivo, grabando vídeos y haciendo fotos con normalidad, incluso adelantando a los sherpas en algunos tramos, iba como un cohete y disfrutando como nunca de la montaña. Álex Txikon me comentaba que habíamos hecho un récord para llegar al Valle del Silencio, en apenas cuatro horas nos habíamos desplazado allí desde el Campo Base a pesar de no contar con los puentes que se ponen sobre las grietas en verano”.
Pero el llamado mal de altura acabó afectándole y, aunque su vida no corre peligro y ya se encuentra hospitalizado en Katmandú, tuvo que pasar un auténtico calvario que le dejó fuera de la aventura. Tuvo que tomar la decisión de “perder altura de la manera más rápida posible para evitar un edema pulmonar o cerebral que, sin lugar a dudas, hubiese puesto en peligro su vida de forma inminente”, afirman los responsables del trekking.
Una evacuación en condiciones extremas
“Álex Txikon y el resto de compañeros estaban realmente preocupados y temiendo lo peor, así que comenzaron a preparar una evacuación en condiciones extremas. El doctor Antonio Cid, médico de urgencias en el 112, nos fue tranquilizando desde España y dando las primeras indicaciones, y además tuvimos la fortuna de contar con el único piloto de Katmandú que es capaz de meter el helicóptero ahí arriba, casi a 7.000 metros de altura, y además con buenas condiciones climatológicas para volar. Así que en un rato pasé de estar en condiciones extremas a ocupar una cama en el hospital donde me están sometiendo a todo tipo de pruebas”, ha explicado el montañero.
“En un par de días estaré de nuevo en casa. Otro año será”, ha dicho Óscar Cardo, según informa la organización de este gran reto de escalar el Everest.
Ahora el reto continúa aún más complicado para Álex Txikon y los sherpas Pechumbe Sherpa, Tenjen Sherpa y Chiji Norbu. Tras sufrir la baja de Óscar Cardo, así como otra anterior de Jonatan, de los seis alpinistas que comenzaron este primer trekking inclusivo quedan cuatro.