El presidente de los empresarios castellanomanchegos, Ángel Nicolás, ha asegurado hoy en que confía que el sector empresarial no se vea afectado por la detención del expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y, al respecto, ha declarado: «A mí un cura malo no me hace perder la fe».
Nicolás, a preguntas de los periodistas antes de clausurar una jornada informativa sobre la nueva ley de Residuos y Suelos Contaminados, se ha limitado a pedir que «actúe la Justicia» para esclarecer los posibles delitos que haya cometido.
Respecto a la incidencia que pueda tener en el sector empresarial, ha confiado en que no tenga ningún efecto y que «seamos todo lo suficientemente inteligentes como para saber que hay empresarios buenos y malos, jueces buenos y malos, o políticos buenos y malos».
«Como decía mi padre, a mí un cura malo no me hace perder la fe», ha finalizado.