2019 sumó a la oferta museística de la ciudad de Toledo un nuevo reclamo turístico: la Colección Roberto Polo (Corpo), que alberga desde marzo el edifico de Santa Fe de la capital regional.
Tras tres años de conversaciones, encuentros y negociaciones dio entrada en España a vanguardias artísticas nunca antes vistas en nuestro país. El legado medieval y el pasado visigodo e islámico de Santa Fe empezaron a convivir en buena armonía con obras de Kandinsky, Delacroix, Paul Manes, Marthe Donas, Karel Maes, Gustav Klucis, Ivan Kliun, Paul Joostens, Eemans, Servranckx, Mannaers… Un total de 171 artistas, algunos consagrados, otros visionarios de su tiempo, pero todos habiendo escrito páginas relacionadas con las vanguardias históricas del norte, centro y este de Europa, desde el siglo XIX hasta nuestros días y desde la abstracción (donde no falta una obra del toledano Rafael Canogar, de los pocos artistas españoles presentes en el museo) o el constructivismo hasta los nuevos realismos y el surrealismo.
«Es el día más importante de mi vida en el arte». Así lo manifestaba el coleccionista y mecenas Roberto Polo durante la presentación a los medios de este nuevo espacio museístico, al que llegaba a calificar como «el sueño de un coleccionista de vocación». Hacía hincapié en que las piezas expuestas llenan «lagunas» del patrimonio español, un patrimonio rico en los antiguos maestros de Flandes y Países Bajos y con grandes talentos en arte visual pero, hasta ahora, con carencias en cuanto a los siglos XX y XXI.
El recorrido por este centro cultural se inicia con ejemplos de artistas del siglo XIX con escasa o nula presencia en España y se cierra con una amplia representación de artistas activos en la segunda mitad del siglo XX y lo que llevamos del XXI, artistas de Bélgica, Italia, España y Estados Unidos, así como de Francia, Gran Bretaña, Holanda o Polonia, algunos de los cuales estuvieron en la presentación.
El marco histórico de Toledo y Cuenca -ciudad esta última a la que está previsto que lleguen obras de la Colección de Roberto Polo- fue clave, señaló Polo, a la hora de elegirlas, también su conexión con Madrid y sus museos.
El museo está incluido en los «Favoritos» de Sotheby’s, una selección de 350 instituciones museísticas de todo el mundo en el que figuran el Louvre, la Tate o el MoMA.