BBVA, en colaboración con los hermanos Roca, ha reconocido, junto a otras nueve empresas, a Aceites García de la Cruz, de Madridejos (Toledo), con uno de los Premios BBVA a los Mejores Productores Sostenibles.
Se trata de la segunda edición de una iniciativa que el banco ha impulsado, junto El Celler de Can Roca, y que pretende dar visibilidad a agricultores, ganaderos y productores de alimentos cuya actividad combina el compromiso con el medioambiente, la apuesta por las medidas de ahorro energético y la alimentación saludable.
La aceitera premiada organizó una cata de dos de sus productos, en la que participaron: Juan Carlos Hidalgo, director territorial Centro de BBVA; Raúl Sainz, responsable de Comunicación, RSC y Relaciones Institucionales de BBVA; Josep Roca, copropietario, junto a sus dos hermanos Jordi y Joan, del restaurante El Celler de Can Roca; Fernando García de la Cruz, director, junto a su hermano Eusebio, de la empresa; y Miguel Ángel Rodríguez e Inmaculada Vega Ortega, director de Operaciones y marketing manager de la aceitera, respectivamente.
Fue una cata guiada por la responsable de Calidad y Seguridad Alimentaria, Almudena Ávila.
«Sostenibilidad y diversidad»
Juan Carlos Hidalgo nos cuenta que con esta iniciativa de la entidad financiera se «resaltan aquellos productos de la tierra de una calidad excepcional«.
Destaca en García de la Cruz, como en el resto de productores premiados, el hecho de que «cuidan la sostenibilidad» y «la diversidad«; y resalta que, en este caso, se trata de una empresa de «casi sexta generación», por lo que no se ha pasado por alto la «importancia del seguimiento familiar«.
Por extensión, como indica Hidalgo, «esto supone riqueza para Castilla-La Mancha».
Aceites García de la Cruz, en cinco continentes
La familia García de la Cruz se ha dedicado al cultivo del olivar desde 1872, cuando empezó con Federico Serrano, a cuidar la calidad del zumo que de ellos se obtiene: el aceite de oliva virgen extra.
Actualmente, Aceites García de la Cruz está presente en los cinco continentes, con una amplia gama de envases, y ha conseguido importantes certificaciones a nivel internacional (IFS, BRC, JASS), que garantizan la calidad de nuestro aceite en el mundo de la alimentación.
Los hermanos Fernando y Eusebio García de la Cruz Pascual dirigen hoy la empresa aceitera, en lo que supone la quinta generación de la familia.
Fernando García de la Cruz valora el «enorme reconocimiento a la labor y al trabajo de muchos años» y, aún más, viniendo «de la mano estos grandes: BBVA y los hermanos Roca». «Estamos muy orgullosos; estamos presentes en más de 40 países y Castilla-La Mancha siempre va por delante, y España, por supuesto».
Además, destaca el valor que BBVA ha dado «al trabajo de las cuatro generaciones que nos ha precedido en este mundo complicado y apasionante que es el aceite de oliva».
«Un aceite de oliva de grandísima calidad»
Josep Roca es jefe de sala y copropietario, junto a sus dos hermanos Jordi y Joan, del restaurante El Celler de Can Roca, del salón de Banquets Mas Marroch en Vilablareix, en Girona y asesor del restaurante Moo en el Hotel Omm de Barcelona.
Los hermanos comparten tres estrellas Michelin y lograron el primer puesto de la lista 50 Best Restaurants en el año 2015.
Josep tiene claro que estos reconocimientos de BBVA suponen «una oportunidad para hacer ver que se hace un aceite de oliva de una grandísima calidad» en Castilla-La Mancha.
Por otro lado, pone en valor que se acentúa la calidad de la aceituna cornicabra, que es seña de la «identidad de un territorio» y permite mostrar al mundo la excelencia de los alimentos de España.
Premios BBVA a los Mejores Productores Sostenibles
Estos reconocimientos de la entidad financiera valoran especialmente la valentía y la innovación a la hora de la elaboración de los productos. Al mismo tiempo, premian la adaptabilidad al medio ambiente y la adopción de medidas de eficiencia energética, como la reducción de las emisiones de CO2.
Además, ponen el foco en la repercusión social y económica de su producción, así como en las acciones puestas en marcha para la preservación de la biodiversidad.
Además de García de la Cruz, en Castilla-la Mancha también ha obtenido este reconocimiento la pasta de La Espelta y la Sal, en Palazuelos-Sigüenza, Guadalajara.
Y a las dos empresas castellanomanchegas se unen otros ocho ganadores: el aceite de oliva de Castillo De Canena Olive Juice (Jaén); la algarroba de Pedro Pérez Martínez (Valencia); el arroz de Riet Vell (Cataluña); las frutas y verduras de Terracor (Islas Baleares) y de ‘Saifresc’ Hortaval Natur (Valencia); la almendra de Almendrehesa (Almería); la miel de Antonio Simón (Madrid) y el tomate Lobello de Caparrós Nature (Almería).
Los premiados verán sus productos de temporada incluidos en una de las recetas que mensualmente El Celler de Can Roca elabora para el proyecto «Gastronomía Sostenible», proyecto de apoyo y visibilización del pequeño productor que promueve, también, la cocina saludable con ingredientes de calidad y temporada.