Cáritas Diocesana atendió el año pasado en la provincia de Toledo a 45.800 personas y calcula que este año habrá un 15 por 100 más de petición de ayudas para necesidades básicas como alimentos, pago de recibos de luz y alquileres.
Estos datos los ha dado la presidenta de Cáritas Diocesana en Toledo, Marisa Martínez, tras la firma de un convenio con la Diputación de Toledo, según el cual la corporación provincial dona 80.000 euros a esta ONG de la Iglesia.
De las personas que atiende Cáritas, la mayoría van derivadas de los Ayuntamientos, entre el 65 y el 70 por ciento, y lo que están notando es si los atendidos antes eran mayoritariamente inmigrantes cada vez hay más españoles, familias que han perdido el trabajo y no tienen recurso.
Según Martínez, Cáritas está «desbordada» por la petición de ayudas, pues, si el año pasado fueron más de 45.800 las personas atendidas, hay que tener en cuenta que cada una de ellas acuden al menos una vez al mes a pedir que les ayuden, lo que da idea de la dimensión del problema.
Cáritas Diocesana de Toledo contó con 564.000 euros para el programa denominado Acogida en Atención Primaria, todo ello con fondos propios y de donativos, sin ayudas de las Administraciones.
Con el convenio firmado hoy, la Diputación de Toledo es la primera vez que colabora con Cáritas, una ayuda que va a suponer un «balón de oxígeno» para esta organización y que servirá para atender a los que llegan con una «urgencia extrema» a pedir ayuda.
El convenio ha sido firmado con el presidente de la Diputación de Toledo, Arturo García Tizón, quien ha indicado que los 80.000 euros se han logrado de los ahorros de otras partidas de la institución y «poquito a poquito» se han reunido los 80.000 euros.
En la firma del acuerdo también han estado el delegado episcopal de Cáritas, José María Cabrero, quien ha agradecido la donación de la Diputación en nombre también del arzobispo, y el delegado de Bienestar Social de la Diputación y alcalde de Argés, Jesús Guerrero.