Castilla-La Mancha será la comunidad autónoma española que más se desvíe del objetivo de estabilidad fijado por el Gobierno en un 1,5 por 100, pues terminará el año con un déficit del 4,9 por 100, según la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA).
El segundo informe del Observatorio Fiscal y Financiero de las comunidades autónomas elaborado por esa Fundación apunta que Madrid, La Rioja y Galicia serán las únicas comunidades autónomas que cumplirán con el objetivo de estabilidad presupuestaria (OEP) previsto para 2012.
El informe plantea que en el conjunto de España no se cumplirá ese objetivo, que se excederá en 0,7 puntos porcentuales del PIB.
En el caso de Madrid, estos expertos creen que lo cumplirá con holgura, con una diferencia positiva de 0,7 puntos, seguido de La Rioja, con 0,5, y Galicia, con 0,4.
En el grupo de las comunidades que no van a cumplir con el OEP destacan las de Castilla-La Mancha y Murcia, que sobrepasarán los 3,4 y 2,2 puntos porcentuales respectivamente del límite establecido, así como Baleares y la Comunidad Valenciana, cuyo desvío será del 1,9 y 1,8 puntos, respectivamente.
Según los cálculos del informe, que aplica dos ajustes para llegar a las cifras, el déficit en términos de Contabilidad Nacional para 2012 será de -2,2 puntos porcentuales del PIB.
El primer ajuste corresponde a modificaciones que se realizan todos los años al déficit presupuestario debidas a recaudación incierta, ampliaciones de capital a empresas públicas que consolidan o presentan pérdidas, encomiendas de inversión mediante empresas públicas o fondos europeos.
Este tipo de causas, precisa Fedea, puede añadir, quitar o dejar inalterado el déficit, pero en la práctica suele añadir más déficit en todas las comunidades
El segundo ajuste calculado corresponde a las liquidaciones del sistema de financiación autonómica de 2008 y 2009, cuyo pago para las comunidades autónomas se aplazó a cinco años por el anterior Gobierno socialista, mientras que el del PP lo ha demorado a diez años.
Corresponde a la incorporación positiva sobre el déficit presupuestario de la décima parte de las liquidaciones de 2008, cuya devolución se alargará hasta 2020, y la décima parte de las liquidaciones de 2009, que se comienza a devolver en 2012 y finaliza en 2022.
Estas liquidaciones no forman parte del déficit de 2012, porque ya lo fueron en 2010 las de 2008 y en 2011 las de 2009 y, por ello, hay que sustraerlas del déficit presupuestario.