El sindicato CC.OO. ha lamentado hoy el «auténtico drama» que supone para la comarca de Talavera la situación de la empresa «Emiliano Madrid», de Cebolla, tras los 360 despidos del pasado verano y los 130 trabajadores aún contratados, pero con un ERE temporal que concluye en noviembre.
La empresa Emiliano Madrid y Estrumaher, dedicadas a las estructuras metálicas y los montajes industriales, llegaron a superar los 800 trabajadores, y su hundimiento ha tenido un impacto directo en la localidad donde se ubica la factoría y en toda la comarca.
Óscar Aguado, de la federación de Industria de CC.OO., ha contado a Efe que temen que los 130 trabajadores que aún mantiene la firma acaben en pocas semanas en las listas del paro, pues la única esperanza sería la reactivación de dos obras importantes ahora paralizadas, una en Sevilla y otra en Arabia Saudí.
El representante sindical ha señalado que los 360 trabajadores que fueron despedidos en julio no han empezado a cobrar la prestación por desempleo hasta septiembre, y aún no han percibido nada desde la empresa por su finiquito, indemnización o nóminas atrasadas.
Los 130 empleados en situación de expediente temporal desde agosto «aún no han percibido su paro, y venían ya de cinco o seis meses sin cobrar, por lo que hay gente que no recibe ningún ingreso desde hace ocho meses», una situación insostenible, según CC.OO.
«No hay familia que pueda aguantar esto», ha expresado Aguado, que ha transmitido que «está habiendo desahucios» como consecuencia del colapso y la poca agilidad del servicio de empleo para gestionar las prestaciones, y de los juzgados, para la reclamación de los impagos a través del Fogasa.
Aguado ha indicado que los representantes sindicales esperan poder mantener una reunión la próxima semana con los administradores concursales nombrados para pilotar la empresa desde que entró en concurso de acreedores y analizar la situación actual.
Para el representante sindical, en la empresa «Emiliano Madrid» el año 2012 ha sido «fatídico», aunque desde varios ejercicios a esta parte, la plantilla se ha reducido entre un 70 y un 80 por ciento, en parte, ha indicado, por la «asfixia» a la que los bancos han sometido a las empresas al negarles el crédito.
Aguado ha opinado que sin medidas de apoyo a la industrialización, «la destrucción de empleo seguirá» y ha lamentado que «no se está haciendo nada a favor de la industria en Castilla-La Mancha».