El tornado que sufrió el pasado lunes el municipio de Torre de Juan Abad, en la provincia de Ciudad Real, arrancó un millar de olivos, así como cepas en viñas, y dañó numerosas infraestructuras, según los datos de los que dispone Asaja de Castilla-La Mancha.
Los efectos del tornado en Torre de Juan Abad
El secretario general de la organización agraria, Florencio Rodríguez, ha indicado en una rueda de prensa que el tornado asociado a la borrasca Herminia arrancó en torno a 1.000 olivos, en su mayor parte jóvenes, aunque también arrancó cepas de viñas de la zona, en la que también derribó numerosas infraestructuras relacionadas con la agricultura y la ganadería.
Olivos jóvenes
A preguntas de los periodistas, Rodríguez ha precisado que los más afectados han sido olivos jóvenes, debido probablemente a que tienen un crecimiento radicular más rápido, aunque también han influido las características de los suelos en los que están plantados.
En este sentido, ha aclarado que no dependió solo de las raíces de los olivos, sino de los suelos en los que se encontraban y de lo que fue la fuerza del viento en esos momentos.
«No ha sido normal»
Rodríguez ha admitido que el fenómeno «no ha sido normal» y ha considerado que está relacionado con el cambio climático que está provocando situaciones de desequilibrio en la meteorología, lo que está generando situaciones de seguía pertinaz en algunas zonas o precipitaciones abundantes como las de la dana de octubre, que están provocando muchos daños y muchas pérdidas.