Un residente del servicio de Oftalmología del Hospital General Universitario de Ciudad Real ha sido premiado por un caso clínico sobre endoftalmitis crónica postquirúrgica, una complicación poco frecuente, pero grave, que puede presentarse meses o incluso años después de una cirugía de cataratas.
Este reconocimiento le ha llegado al doctor Carlos Campo, residente del servicio de Oftalmología del Hospital de Ciudad Real, en el marco del noveno Curso de Actualización para MIR y Post-MIR, conocido como SECOMIR 2025, organizado por la Sociedad Española de Cirugía Ocular Implanto-Refractiva (SECOIR).
La endoftalmitis crónica es una infección insidiosa asociada frecuentemente a bacterias de crecimiento lento y se caracteriza por inflamación recurrente y la presencia de placas blanquecinas en el saco capsular o en la lente intraocular debido a la comunidad de bacterias que crecen adheridas a la superficie.
El diagnóstico definitivo se basa en los resultados de la PCR, una prueba que permite detectar o descartar enfermedades oculares infecciosas, ya que los cultivos suelen ser negativos, según señala el estudio presentado por Campo bajo la supervisión del doctor Antonio Adán, oftalmólogo de la Sección de Córnea y Superficie Ocular del Hospital de Ciudad Real.
El manejo incluye tratamiento antibiótico y, en casos refractarios que no responda a tratamiento convencional, se plantea un tipo de microcirugía ocular (vitrectomía pars plana) y recambio de la lente intraocular.
En el caso clínico descrito, ha explicado Campo, la paciente mostró mejoría clínica con tratamiento médico, evitando intervención quirúrgica.
“La inflamación ocular persistente tras cirugía de cataratas requiere descartar infección crónica, ya que la endoftalmitis crónica tiene una incidencia muy baja, pero supone un desafío diagnóstico y terapéutico”, ha señalado Campo.
Un enfoque individualizado “es clave para ofrecer un tratamiento óptimo, potenciando el pronóstico visual y minimizando complicaciones”, ha añadido el doctor.
Este caso, ha dicho, revela la importancia de considerar la endoftalmitis crónica en la inflamación ocular recurrente y de utilizar pruebas avanzadas como PCR para su diagnóstico.