La cosecha nacional de cereales de invierno (trigo, avena o cebada) alcanzará este año 13,8 millones de toneladas, un 30 % menos que en la campaña pasada, debido al exceso de calor y a la sequía, según ha informado hoy Asaja, que ha indicado que en zonas de Albacete, el descenso puede ser del 80 %.
La organización agraria ha resaltado, en un comunicado, que las «altas temperaturas de primavera han dado al traste con las previsiones de una buena cosecha», lo que sumado a la falta de agua ha provocado un descenso de rendimientos que oscila entre el 15 % en Andalucía y el 80 % en zonas de Albacete, Murcia y la Comunidad Valenciana.
En cuanto a Castilla y León, primera autonomía productora, Asaja ha añadido a la sequía los efectos de enfermedades como la «roya amarilla».
En general, la producción de cereales de invierno será cinco millones de toneladas inferior a la de 2013, según han precisado a Efe fuentes de la Asociación de Jóvenes Agricultores.
Según el comunicado, habrá una reducción de cosecha de dos millones de toneladas respecto a la media de las producciones de los últimos cinco años, que se situó en 15,6 millones.
Las previsiones difundidas hoy afectan a los cultivos de invierno, de secano, y no conciernen ni al maíz, ni al arroz.
Dentro del total de cereales de invierno, según Asaja, cinco millones de toneladas corresponden a trigo blando, 700.000 toneladas a trigo duro y 6,7 millones de toneladas a cebada.
Asaja ha resaltado que, a la caída de los rendimientos, se ha sumado un «encarecimiento» de los costes de producción, especialmente en lo que se refiere a tarifas eléctricas, fertilizantes y abonos.
Respecto a la sequía, la organización agraria ha recordado que es un riesgo asegurable en España y que, según los datos de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa), el 54 % de la superficie de herbáceos está asegurada.
En este sentido, Asaja ha apuntado el esfuerzo de las compañías aseguradoras para realizar las peritaciones con rapidez y ha reclamado la «máxima diligencia» tanto en las tasaciones como en las liquidaciones de los daños a los agricultores.
En cuanto a los precios, ha añadido que ante la considerable merma de cosecha «no existen motivos para pensar que desciendan» y que, hasta la fecha, las cotizaciones del trigo duro siguen una tendencia al alza desde que se inició la recolección en el sur de España.
En cuanto al mercado internacional, ha añadido que aunque las perspectivas de cosecha son buenas las de consumo también, lo que junto con la «inestabilidad política en Ucrania» y la aparición de «El Niño» en el Pacífico hace pensar en una campaña con existencias «ajustadas» y demanda «fuerte», según el comunicado.