La invasión de Rusia a Ucrania lleva aparejada una crisis humanitaria en la que Cruz Roja juega un papel crucial. En su delegación en Castilla-La Mancha están preparados para ayudar a personas refugiadas de ese país cuando lleguen a la región.
«Cuando comiencen a llegar tendremos un papel más destacado», explica a encastillalamancha.es el presidente de Cruz Roja Castilla-La Mancha, Jesús Esteban, quien indica que la organización tiene en marcha un sistema de búsqueda por si han perdido contacto con un familiar en Ucrania.
Cruz Roja pone a disposición de la comunidad ucraniana en España el correo busquedas@cruzroja.es, así como los teléfonos +34678443834 y el 900221122, para poder encontrar a los familiares con los que no logren establecer contactos.
Números para hacer donaciones
Esteban subraya que desde Cruz Roja internacional se está reclamando que se «respete el derecho humanitario de la población civil«, así como que se establezcan corredores humanitarios.
Explica que en este caso es la federación internacional y las Cruces Rojas de los distintos países limítrofes la que se encarga de ayudar en primera instancia a todas las personas que huyen de este horroroso conflicto.
Además, asegura que los más útil para ayudar a la crisis humanitaria desatada en este conflicto es realizar donaciones, puesto que «aunque la gente lleva con buena voluntad ropa, medicamentos, trasladarlo hasta el país es carísimo y no sabemos si va a llegar a donde realmente se necesita».
Por ello Cruz Roja ha habilitado números de cuenta y Bizum donde realizar donaciones con las que hacer frente las emergencias.
- CUENTAS BANCARIAS | BIZUM
- SANTANDER ES44 0049 0001 5321 1002 2225 | 33512
- BBVA ES92 0182 2370 4600 1002 2227 | 33467
- CAIXABANK ES28 2100 0600 8502 0196 0066 | 04057
- SABADELL ES31 0081 5232 2800 0108 4716 | 04048
- BANKINTER ES75 0128 0010 9701 0012 1395 | 00087
- B. COOPERATIVO ES86 0198 0500 8020 2205 3421 | 02727
- TRIODOS ES18 1491 0001 2130 0008 9598
También se pueden mandar SMS para enviar distintos importes. Enviando UCRANIA con el número 28092 se puede donar 1,2 euros, UCRANIA al 38088 son 3 euros, y UCRANIA al 39092 son 6 euros.
El presidente de Cruz Roja Castilla-La Mancha recuerda que esos números son exclusivos para ayudar en Ucrania.
¿Cómo funciona la acogida?
Inevitablemente este conflicto va a provocar que muchas personas tengan que pedir asilo en otros países. España y Castilla-La Mancha abren sus puertas para acoger a estas personas. «Se va a recibir a todos los refugiados«, indica Jesús Esteban, quien recuerda que se hará como en otros conflictos, puesto que a Castilla-La Mancha han llegado personas de Siria, Afganistán e incluso del Donbás, en Ucrania, donde el conflicto empezó en 2014.
De hecho relata el caso de una pareja de refugiados ucranianos que hubo en Toledo, de quienes destaca lo «solidarios» que eran y sus ganas «de contribuir, no de vivir de las ayudas, sino ser útiles«.
Cuando los refugiados llegan a nuestra tierra, comienza la primera fase, la llamada de acogida por Cruz Roja. Ahí la entidad les «provee de una vivienda alquilada, porque es una forma de normalizar la vida de las personas«.
Esta fase dura 9 meses y a las familias se les alojan en pisos y a las personas que vienen sin familiares, comparten con otros asilados.
Esteban destaca que estás personas «son superagradecidas, no tienen problemas de convivencia, siempre como diciendo ‘si aquí tenéis de todo y estáis quejándoos'».
En esa primera fase, también en colaboración con otras administraciones, como ayuntamientos o las consejerías de Sanidad y Educación, se buscan viviendas, colegios para los niños, se solucionan los problemas burocráticos, se imparten clases de español para quienes no conozcan el idioma y por último entran en el plan de empleo de colectivo desfavorecido, donde buscan oportunidades laborales para estas personas.
Una vez terminada esa primera fase arranca la segunda, la de integración, donde las personas asiladas alquilan por sí mismos y se van haciendo responsables de su situación en el país. A través de ese plan de empleo luego surgen oportunidades de empleo con las empresas que colaboran en el mismo.
Se llama de integración, aunque en muchos casos estas personas no vienen para quedarse. «La realidad no es así», indica Jesús Esteban, quien expresa que eso pasa cuando un conflicto «se cronifica», pero lo normal es que esas personas quieran regresar a su país cuando pasa el conflicto, como así pasado con el caso de la guerra de Bosnia.