El jurado ya ha hecho su elección y Cuenca no será el centro gastronómico del país el próximo año. La candidatura fue creada por la ciudad para conseguir este título, después de intentarlo también el año pasado y quedar finalista. Este año ha sido de igual manera finalista, junto a León, ciudad que ha conseguido los apoyos necesarios para convertirse en Capital Gastronómica en 2018.
La ciudad de las casas colgadas ha elaborado una candidatura que ha sido apoyada por más de 150 instituciones y personalidades, entre las que se encuentran María Dolores de Cospedal, Rafael Catalá, el alcalde de Miami -que visitó hace unas semanas la ciudad-, el exseleccionador Vicente del Bosque o Joaquín Caparrós.
El primer edil conquense, Ángel Mariscal, presentó dicha candidatura para la que contó con el apoyo de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad.
32 páginas forman el dossier en el que se reúnen todos los atractivos de la ciudad, tanto monumentales e históricos como, por supuesto, gastronómicos que intentarán reunir a miles de visitantes durante el próximo año para descubrir los rincones de la capital y las texturas y exigentes sabores que plantean sus platos más típicos y los menos conocidos.
La campaña #CuencaSabeBien, no obstante, ha conseguido gozar de gran popularidad en las redes sociales, donde carteles, fotos de apoyo y vídeos han sido compartidos durante las últimas semanas para apoyar la candidatura de la ciudad para 2018.
El morteruelo, los zarajos, el vino conquense, el queso manchego, ajoarriero, gachas, y otras decenas de platos típicos tendrán que esperar para ser dignos anfitriones de la cultura gastronómica de España.