El Gobierno de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Cuenca han suscrito este miércoles el convenio de colaboración para acelerar la puesta en marcha de los remontes mecánicos que unirán el Paseo del Huécar, en la parte baja de la ciudad junto al Auditorio, con la calle Colmillo, antesala de la Plaza Mayor.
En la presentación, se ha dado cuenta de que este proyecto constará de dos tramos que salvarán un total de 57 metros. Un primer intervalo de 34 metros desde el Paseo del Huécar a la calle Santa Catalina, y a continuación, por el barrio de San Martín, hasta la calle Colmillo, «un punto de entrada que será un escaparate sin igual», tal y como ha detallado el consejero de Fomento, Nacho Hernando.
«Un revulsivo turístico y cultural»
Hernando ha reparado en que estos remontes servirán como un «salto cualitativo» y un «revulsivo turístico y cultural».
Ha recordado en que en plena pandemia se adjudicó el contrato para poder llevar a cabo el estudio del anteproyecto, con la particularidad de que se ha hecho a cargo de gente de la ciudad.
Ahora que se llega al final del estado de alarma, ya se puede presentar un proyecto «muy importante» para Cuenca. «Van a ser un símbolo. Esto también es marca España», ha celebrado Hernando.
«Servirá para unir las dos Cuencas»
El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha arrancado con un mensaje de «consuelo y ánimo» para todas las familias que han sufrido lo peor del COVID, al tiempo que ha agradecido la colaboración institucional con el Gobierno autonómico, por la que ha dado las gracias al presidente regional, Emiliano García-Page.
Sobre el remonte, ha señalado que servirá para «unir las dos Cuencas», para lo que «por fin» cuenta con el «favor» de todas las administraciones, después de años en los que, ha considerado, no ha sido así por los gobiernos locales precedentes del Partido Popular.
Son 5 los millones de euros que aporta el Gobierno autonómico más 1,2 millones del lado del Consorcio de la ciudad de Cuenca.
«Estamos preparados para acometer esta nueva infraestructura, una obra que tras una década será una realidad», ha celebrado Dolz. Será «un revulsivo y en sí mismo marcará un antes y un después desde el punto de vista de movilidad, accesibilidad y turismo, conectando la ciudad de una forma eficiente con su Casco Antiguo», ha indicado.