Durante la mañana del lunes 27 un niño de dos años fue atropellado cerca de la estación de autobuses de Cuenca. La fatalidad hizo que el menor, un niño refugiado pakistaní que llegó junto a su familia ayer mismo a la capital conquense, sufriese heridas que llevaron a los servicios sanitarios a evacuarle de urgencia en helicóptero hasta el Hospital Universitario de Albacete desde el Virgen de la Luz de Cuenca, donde fue ingresado en un primer momento.
Precisamente en este centro albaceteño permanece ingresado en la UCI Pediátrica en un estado estable dentro de la gravedad que presenta el cuadro clínico del pequeño, tal y como han confirmado a encastillalamancha.es fuentes del Sescam.
El jefe de la Policía Local de Cuenca, Francisco Durán, explicaba ayer el suceso: «El niño se ha despistado y ha salido por delante de un coche que estaba estacionado» en la calle Fermín Caballero de Cuenca.
Al parecer, el vehículo que circulaba por el carril derecho de esta vía sí ha visto al niño y ha frenado, pero el coche que circulaba por el carril izquierdo «no lo ha visto y le ha dado un golpe fuerte». El accidente se produjo sobre las 11:38 de la mañana.
Y es que el suceso dispuso de la peor de las suerte. Su familia había llegado para quedarse en un piso de acogida que ha facilitado Cruz Roja en la capital conquense y, justo antes de desplazarse al mismo, sucedió el atropello. La familia ya estaba en España antes de llegar a Cuenca y permanecía temporalmente en Bilbao, desde donde viajaron esa misma noche.