Dar la cara, escucha activa y reuniones diarias en el centro de mando, la agenda de Page en la catástrofe de Letur y Mira
Las primeras 48 horas fueron vertiginosas tratando de hallar y dar respuestas en medio de la desolación, el horror y el dolor por lo que ocurría en Letur y un poco más tarde en Mira. Reuniones, visitas y teléfono se mezclaron de día y de noche; la primer, en vela, y la segunda, hasta bien entrada la madrugada. Así gestionó el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, la catástrofe que la DANA descargó sobre dos municipios de la región