Un centenar de personas, la mayoría trabajadores temporeros, ha sido desalojados de un asentamiento próximo al cementerio del municipio conquense de Las Pedroñeras, en cuya comarca se ha iniciado estos días la campaña de recogida del ajo morado. Según ha relatado uno de los afectados, Abdekamad Momine, algunos de los desalojados esta mañana por la Policía Local y la Guardia Civil esperaban en el lugar con sus familias, incluidos niños de corta edad, mientras buscaban un trabajo.
«Estamos esperando a ver si hay oportunidad de trabajar» ha afirmado Momine, quien lleva cinco años acudiendo a Las Pedroñeras como temporero.
«Allí hay unos árboles y la gente se pone una manta o lo que sea y ahí duermen», ha relatado este trabajador marroquí, quien ha precisado que los que han ocupado la zona son marroquíes y rumanos principalmente, aunque el terreno no está acondicionado para la acampada.
El alcalde del municipio, José Manuel Tortosa, ha negado que existan campamentos o asentamientos de temporeros en el término municipal porque allí no hay personas allí «de forma continuada».
«No se puede decir que sea un asentamiento», ha comentado el alcalde, quien ha explicado a continuación que lo que se ha hecho hoy ha sido limpiar la zona ya que ayer jueves, en las proximidades, se produjo un pequeño conato de incendio al haber personas que hacen fuego para cocinar.
Mientras Momine se ha quejado de que el Consistorio no ha dado una solución a las personas que han ido a hablar con el alcalde, este ha incidido en que los temporeros no deben ir al pueblo sin contar con un contrato de trabajo previo.
Tortosa ha afirmado que en Las Pedroñeras hay muy poco trabajo y que los interesados en trabajar en la campaña del ajo deben ponerse en contacto anteriormente con los agricultores que van a realizar los contratos.