La Policía ha desarticulado, con la detención de tres personas, un grupo organizado que presuntamente se desplazaba por España para cometer robos en viviendas, normalmente de día y sin que estuvieran los inquilinos, y al que por el momento se le imputan 47 asaltos en Madrid, Castilla-La Mancha y Galicia.
Según ha informado hoy la Dirección General de la Policía, los casi cincuenta robos que se les imputan los cometieron en Madrid, Guadalajara, Toledo y A Coruña, a donde se desplazaban desde sus domicilios con esa finalidad.
Se trata de dos hombres de nacionalidad rumana de 30 y 40 años y de un español de 41.
Los asaltos a las viviendas los cometían casi siempre durante el día y cuando los moradores no se encontraban en el interior, empleando el método del resbalón (introduciendo un plástico para mover el pestillo) o con llaves maestras.
Su pericia les permitía cerrar de nuevo las puertas cuando se iban de las viviendas, sin dejar rastro, de manera que los inquilinos tardaban tiempo en darse cuenta del robo.
La operación se inició cuando los investigadores supieron que se habían cometido varios robos en viviendas de la provincia de Guadalajara en los que se habían sustraído joyas y ordenadores, aunque las cerraduras no habían sido forzadas.
Los investigadores relacionaron estos robos con un grupo itinerante especializado en el asalto de domicilios que preparaba sus acciones concienzudamente, con labores de información y vigilancia previas para elegir las zonas más apropiadas.
Se desplazaban a diario a diferentes localidades de la geografía española para perpetrar los robos y luego regresaban a sus domicilios.
Una vez cometidos los robos se deshacían del botín vendiendo las joyas en un local «compro oro» que presumiblemente las fundía, o bien enviando los artículos a Rumanía.
En uno de los asaltos cometidos en Guadalajara el autor se apoderó de las llaves de la vivienda del hijo de la víctima y las utilizó para acceder a la misma horas después, sustrayendo joyas y equipos informáticos.
Con todos los datos obtenidos se les identificó y se les detuvo en Guadalajara tras la comisión de un asalto.
En los registros realizados en un domicilio en Toledo y una nave industrial en Arganda del Rey (Madrid) fueron recuperados 16 relojes de alta gama, 47 piezas de joyería, smartphones y otros aparatos electrónicos.
También se encontró un vídeo con instrucciones para abrir cerraduras y un ‘kit’ de herramientas para cometer los robos.
Las detenciones se enmarcan en el «Plan operativo contra la delincuencia itinerante» puesto en marcha por la Policía Nacional el pasado mes de enero con el objetivo de ofrecer una respuesta coordinada y global para la investigación de delitos cometidos por grupos organizados con movilidad geográfica.