El Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 de Castilla-La Mancha gestionó 323.153 llamadas procedentes durante el primer semestre de 2020, en las que se solicitaba ayuda inmediatas para incidentes como incendios, accidentes, enfermedades o relativos a seguridad ciudadana.
Durante los seis primeros meses de 2020 se contabilizaron en el servicio de emergencias 112 en torno a 800 llamadas procedentes menos que en el mismo periodo del pasado año, debido en parte al estado de alarma declarado a consecuencia de la pandemia originada por el coronavirus SARS-CoV-2, ha informado este domingo en una nota de prensa la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.
La pandemia provocó que hubiera una reducción significativa en el número de llamadas, tanto recibidas como procedentes, relacionadas con emergencias.
Las llamadas procedentes son las que generan la gestión de una urgencia o emergencia real y que pueden suponer la activación de los grupos de intervención como bomberos, policías, sanitarios, empresas de suministro o mantenimiento, etcétera.
Por lo que respecta al número total de llamadas recibidas en el 112 durante el primer semestre de 2020 ascendieron a 669.267, a las que se suman las llamadas procedentes y aquellas que no han dado lugar a la gestión de emergencias y que suelen ser equivocaciones, bromas o ruidos del sistema.
La situación de crisis sanitaria causada por el coronavirus se reflejó en las cifras mensuales, de forma que marzo, el mes en el que se declaró el estado de alarma, fue cuando se registraron un mayor número de llamadas, tanto totales como procedentes.
En marzo se registraron un total de 148.552 llamadas recibidas, de las cuales 76.214 fueron llamadas procedentes, ha apuntado la Consejería, que ha precisado que este aumento de comunicaciones fue debido a la demanda de información sobre la COVID-19 los primeros días tras declararse el estado de alarma.
Para cubrir este sustancial incremento se modificó la estructura de telecomunicaciones del 112 con la dotación de más líneas de entrada de llamadas, de tal manera que se ha pasado de una capacidad de 120 llamadas entrantes a una de 390, una mejora que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido mantener de forma permanente.
Durante los meses de abril y mayo se registró un menor número de llamadas relacionadas con las emergencias, respecto a los mismos meses de años anteriores, lo que se explica por el confinamiento de la población.
Así, el número de comunicaciones totales registradas en el 112 durante abril fue de 96.539, unas 15.800 menos que en el mismo mes de 2019, una circunstancia que se reprodujo también en mayo, cuando se recibieron 104.040 llamadas totales, frente a las 117.168 registradas en el mismo período de 2019.