El alcalde de Chiloeches, César Urrea (PP), ha afirmado hoy que la oposición quería evitar la celebración del pasado Pleno del lunes porque «lo que querían era no llegar al punto número 5 donde se votaba rebajar las dietas por asistencia a plenos y comisiones».
En nota de prensa, Urrea ha salido al paso de las acusaciones realizadas por el PSOE, que acusó al alcalde de Chiloeches de expulsar del pleno al portavoz del Grupo Municipal del PP, a pesar de que éste había sufrido «insultos y amenazas» de un asistente al pleno y del teniente de alcalde del municipio.
Según el regidor de Chiloeches, «la oposición quería evitar la celebración del pleno y aprovechó que Santiago Gómez Motiño, el concejal díscolo del PP, insultó gravemente a un vecino que asistía al pleno para reventarlo».
Según ha explicado el alcalde, «la sesión se abrió con absoluta normalidad», pero al poco tiempo de empezar fue varias veces interrumpido por el portavoz de IU, Rafael Peñalvo, que aludía al procedimiento que debía seguirse en un pleno.
César Urrea ha señalado que le pidió que cesara en su «actitud desafiante», pero ha lamentado que el edil de IU no hizo caso «porque sólo quería imponer un orden del día diferente al establecido en la convocatoria».
«Si IU cree que se infringen estas leyes ahí tiene los tribunales para denunciarlo», ha agregado y ha instado a esta formación a explicar a los vecinos de Chiloeches los motivos que «tienen para impedir la celebración normal del pleno».
Además, Urrea ha acusado a los ex concejales del PP Santiago Gómez Motiño y Maribel Fernández de fomentar los incidentes que acabaron en insultos entre público y concejales.
Por último, el alcalde ha manifestado que no entiende por qué el PSOE abandonó el pleno porque levantó la sesión.