El Ayuntamiento de Toledo ha destacado que, con la llegada de 2015, han entrado en vigor las Ordenanzas Reguladoras de las Tasas y los Precios Públicos Municipales que recogen una rebaja de la presión fiscal, un descenso generalizado de los impuestos y una disminución del Impuesto de Bienes Inmuebles.
En un comunicado, el gobierno local ha afirmado que, en la recta final de la legislatura, ha mantenido «el mismo compromiso para garantizar los servicios municipales y los empleos que dependen del Ayuntamiento», y todo ello sin que suponga una «merma en la calidad de las intervenciones y las actuaciones ni aumentar carga impositiva en las familias toledanas».
Así, ha argumentado que, fruto de esta labor, en el pasado mes se aprobaron sin votos en contra las Ordenanzas Fiscales para 2015, un documento que conlleva para los ciudadanos una rebaja de la presión fiscal, un descenso general de las tasas y otras medidas como la disminución del IBI o la congelación de las tarifas del transporte público de viajeros.
En el caso concreto de la bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles, el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Toledo ha recalcado que «mientras otras administraciones aprueban subidas de impuestos», el Ayuntamiento de Toledo aplica para 2015 una rebaja general del 0,5 por 100 de las tasas y precios públicos, acorde con el Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes de agosto.
Fuera de esta norma, hay una rebaja mayor en el IBI, ya que pasa el tipo de gravamen del 0,46 al 0,45, lo que reducirá el recibo final que se gire a los ciudadanos.
También baja la tasa de gestión de residuos sólidos urbanos, que recoge una rebaja de entre uno y seis euros para los usos residenciales y de cinco euros para los solares; además, se consolidan las bonificaciones para el uso comercial que en el texto de la anterior ordenanza se establecían como transitorias.
Por lo que respecta al Impuesto de Actividades Económicas (IAE), se modifica para bonificar a aquellas empresas que aumenten la contratación de personal y la tasa de Bomberos se aplicará sólo para aquellos casos que exista negligencia o falta de mantenimiento de los bienes.
El Gobierno local ha considerado que el rigor que ha presidido la gestión de las cuentas municipales en este tiempo, a pesar de las dificultades económicas y «de los recortes de otras administraciones», ha permitido que Toledo «tenga solvencia económica», finalice con una liquidación positiva y que los toledanos afronten 2015 con una menor carga fiscal.