La incorporación de nuevos profesionales y la adquisición de nuevo material técnico han permitido al Servicio de Urología del Hospital Vírgen de la Luz de Cuenca comenzar a realizar cirugía laparoscópica, una técnica novedosa que permitirá al complejo hospitalario realizar nuevas intervenciones sin tener que derivar a los pacientes a otros centros. Además de la intervenciones quirúrgicas se han comenzado otros tratamientos con pacientes con cáncer de próstata.
El Servicio de Urología del Hospital Vírgen de la Luz de Cuenca, que al año atiende a más de 2.800 pacientes en consulta y realiza alrededor de 700 intervenciones quirúrugicas, ha comenzado recientemente, gracias a las últimas dotaciones de material técnico y profesional, a praticar intervenciones con cirugía laparoscópica, una técnica novedosa que permite una recuperación más rápida y menos dolorosa de los pacientes y que presenta menos complicaciones que la cirugía abierta.
Según ha informado la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha, mediante nota de prensa, entre la dotación de material recibida por el hospital conquense se encuentran un aparato láser, una máquina laparoscópica y un uteroscopio. Hasta el momento ya se han realizado con éxito varias nefrectomías y prostastectomías radicales.
Además, a este servicio integrado por seis facultativos especialistas, una enfermera y dos auxiliares de enfermería, se incorporó en marzo la doctora Lorena Ortiz, hasta ahora la única encargada de realizar las laparoscopias. La jefa del Servicio de Urología, la doctora Mónica de Cabo, ha explicado, no obstante, que el objetivo es que con el tiempo esta técnica pueda ser realizada por el resto de urólogos del hospital.
Hasta el momento, las nuevas dotaciones han permitido al Servicio de Urología, además de las intervenciones quirúrgicas mencionandas, comenzar a tratar las litiasis uretrales y realizar cistectomías radicales sin tener que derivar a los pacientes a otros centros. También han permitido a los doctores preparar a pacientes con cáncer de próstata que vayan a recibir radioterapia y realizar pruebas complementarias de alta resolución que permitan reducir los tiempos de espera del diagnóstico para empezar con el tratamiento.