El único imputado por el incendio de Poyatos (Cuenca), Lorenzo Ruiz, presentará una querella criminal contra el Servicio de Emergencias 112 y contra el Juzgado de Instrucción número 2 de Cuenca.
Ruiz, que ha ofrecido hoy una rueda de prensa acompañado por su abogado, José María Castilla, ha explicado que la querella contra el 112 será por no facilitar las llamadas que recibió este servicio el día que se declaró el fuego y contra el Juzgado de Instrucción número 2 de Cuenca por no acatar una sentencia que autorizaba la audición de las llamadas, ya que lo considera clave para su defensa.
Ha señalado que esta prueba es fundamental para determinar que el acusado no se encontraba ni a la hora ni en el lugar de los hechos cuando se inició el fuego.
Por ello, el imputado presentará una querella criminal contra los actuales y anteriores responsables del Servicio de Emergencias 112 por no facilitar las llamadas que recibieron entre las 12:00 y las 17:00 horas del 21 de julio de 2009, día en el que se originó el fuego en la Serranía de Cuenca.
También presentarán una querella criminal contra el juzgado por no obligar al 112 a entregar las llamadas, a pesar de que una sentencia de la Audiencia Provincial de Cuenca indicaba que se procediera «a la audición de la grabación en los términos interesados por la representación» del acusado, algo que se solicitó en 2010.
La presentación las querellas criminales por parte de Ruiz está pendiente de que al acusado se le conceda la petición de justicia gratuita.
José María Castilla ha aseverado que si demuestran que hay avisos anteriores del inicio del fuego a las 15:40 horas quedaría probado que el imputado no fue el causante del incendio, porque tiene testigos que lo sitúan en la localidad conquense de Tragacete a las 15:35 horas.
Además, según el abogado, se podría haber roto «la cadena de custodia» de esta prueba.
Por su parte, Lorenzo Ruiz ha vuelto a proclamar su inocencia y ha recordado que ha pasado tres meses en prisión por un hecho que asegura no cometió, por lo que ha afirmado que se encuentra en una situación de «indefensión».
«Nadie salvo yo quiere que se sepa la verdad. Todas las pruebas que se han solicitado encaminadas a demostrar la existencia de pruebas falsas se me han denegado sistemáticamente», ha aseverado.
Ruiz ha puesto su caso en conocimiento de Amnistía Internacional (AI), una organización en defensa de los derechos humanos y que persigue casos de presuntos tratos de favor a los cuerpos y fuerzas de orden público.
Entretanto, el procedimiento abierto contra Ruiz sigue abierto y ya hay una resolución que ordena iniciar los trámites para celebrar un juicio con jurado popular, que según el abogado, es caro e innecesario.
El incendio de Poyatos arrasó más de 1.800 hectáreas de monte en el verano de 2009 y tanto la Junta de Comunidades como el Ayuntamiento de Cuenca forman parte de la acusación de este proceso judicial junto con los afectados por las parcelas quemadas.