El Ayuntamiento de Toledo pondrá en marcha en marzo el «Plan Tacones», una iniciativa para compactar 60 calles del Casco Histórico de forma que sea más cómodo caminar por ellas porque se rellenarán los baches y se aplicará un relleno uniforme de forma que se eviten resbalones o torceduras de tobillos.
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, y el concejal de Urbanismo, Javier Nicolás, han presentado en rueda de prensa este proyecto que se hará con un presupuesto inicial de 75.000 euros y que acometerá una brigada especializada de trabajadores municipales que dedicará, en particular, al mantenimiento de las calles del Casco.
De forma paralela, el Ayuntamiento de Toledo llegará a un acuerdo con una empresa para que, en adelante, sea la responsable de tapar las zanjas que se abren por motivos de agua, gas o telefonía ya que hasta ahora estas obras las acometen empresas que no siempre cuentan con operarios que saben colocar perfectamente cantos o adoquines.
El alcalde ha reconocido su «obsesión» por trabajar de forma cercana a los ciudadanos y en este sentido ha dicho que el «Plan Tacones» tiene «más miga» de lo que puede parecer teniendo en cuenta que afecta de forma directa a muchos ciudadanos y turistas.
«Muchas mujeres, sobre todo, me planteaban que es imposible andar por algunas calles, que se matan si van con tacones sobre todo cuando hace mal tiempo», ha explicado el alcalde.
Ante este problemática, ha añadido, el Ayuntamiento podía haber respondido «que tengan cuidado, que las calles están así de siempre» o bien proponer alguna actuación, como ha hecho.
Inicialmente se actuará de forma completa en 22 calles y de manera parcial, según tramos que lo necesiten, en otras 40, aunque no se trata de un «documento cerrado» y se valorarán nuevas actuaciones.
Lo que se hará en estas calles es eliminar el musgo o la hierba (si lo hay), tapar los baches con cantos, limpiar con agua a fuerte presión y aplicar una masa de relleno uniforme para evitar que los cantos sobresalgan y puedan producir tropezones, resbalones o torceduras de tobillos.
El «Plan Tacones» comenzará en las calles Santa Úrsula y San Torcuato y seguirá en otras como San Pedro Mártir, Cristo de la Luz, Colegio de Doncellas, San Marcos y Carretas, entre otras.
El objetivo es que en todas estas zonas se pueda «caminar con más tranquilidad», tanto con zapatos de tacón como con carritos de bebé, por ejemplo.