La portavoz del grupo socialista en la Diputación de Guadalajara, María Antonia Pérez León, ha tachado hoy de «calamitosa» la política turística de la esta institución por el importante descenso en pernoctaciones y viajeros de la provincia.
Según ha señalado en rueda de prensa, el descenso de las pernoctaciones de turismo rural en junio ha sido del 33% respecto al mismo mes de 2011, un mes antes del nuevo equipo de gobierno del PP en la Diputación de Guadalajara.
Ha criticado que en dos años se haya perdido uno de cada tres viajeros que se alojaban en establecimientos rurales de Guadalajara y ha asegurado que «no es por la crisis o por un descenso general del turismo rural, porque en el resto de Castilla-La Mancha y de España han aumentado».
A juicio de Pérez León, la primera causa del bajón del turismo rural en Guadalajara es la ausencia de promoción turística de la provincia, que se plasma por ejemplo en la eliminación de una partida anual de 200.000 euros de los presupuestos que se empleaban en la divulgación de la oferta de turismo rural.
Además de este recorte que ha considerado «injustificado» en la política turística de la Diputación, Pérez León ha denunciado que el gobierno provincial tiene almacenado todo el material divulgativo que se dejó elaborado y que la provincia ya no acude a eventos como la Feria de Turismo Interior (Intur) de Valladolid o la Feria de Valencia.
Otro motivo que, según Pérez León, explica la caída del turismo rural en Guadalajara es que se han «abandonado» los eventos que actuaban como focos de atracción o se ha adulterado la finalidad de las instalaciones que ejercían de escaparate de las muchas riquezas turísticas de la provincia, como el centro de interpretación turística de Guadalajara en el castillo de Torija.
El PSOE recuerda que la Diputación decidió cobrar dos euros por la entrada, «que es algo parecido a que una tienda cobre por mirar sus productos», y el resultado es que entre abril de 2012 y junio de 2013 la Diputación ha ingresado por este concepto 11.000 euros, que Pérez León ha tachado de «cantidad ridícula».